Los episodios que vive Miguel Cruz cada mes parecen ser sacados de una película de terror.
En la universidad los exámenes lo atormentaban. Miguel Cruz, administrador de profesión, experimentó en el 2015 un nivel de estrés tal que lo llevó a experimentar alucinaciones nocturnas. “Durante exámenes parciales y finales era un hecho que me iba a suceder, al menos, una vez a la semana”, admite.
Las personas que han experimentado el extraño fenómeno de la parálisis del sueño sienten que no pueden mover su cuerpo cuando están a punto de dormirse o despertarse o pueden tener alucinaciones sobre una presencia malévola que los presiona y no los deja respirar. Este era el caso de Miguel. “Mis alucinaciones estaban empezando a afectarme. Un día podía ver extraterrestres y al otro demonios. Eran algo que realmente me causaba pánico”, asegura.
La solución. La situación de Miguel se había vuelto insostenible e intentó buscar una solución. En medio de su investigación encontró un blog en el que aconsejaban que lo mejor era calmarse y concentrarse en respirar. “Lo intenté y rápidamente el problema disminuyó. Es difícil de explicar lo asustado que me sentía en esos momentos, mi cabeza jugaba conmigo mismo”, dice.
Esta condición no tiene diagnóstico conocido pero muchos casos coinciden en lo mismo: el estrés, la falta de sueño y la ansiedad pueden generarla.
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