Lo que dice tu forma de vestir de ti

Muchas personas se visten de determinada manera por una cuestión de costumbre y comodidad. Pero si se detuvieran a pensar que con esa elección están revelando detalles acerca de sus emociones y personalidad, probablemente cambiarían de vestuario.

Una investigación realizada en Northwestern University reveló la importancia de lo que se llama cognición investida, es decir, la influencia que las prendas ejercen sobre el usuario. Esto quiere decir que no hay que vestirse como uno se siente, sino como le gustaría sentirse: si quieres convencerte de que eres sexy o poderoso, deberás lucir un look que te haga ver de esa manera.

Si sientes que tu imagen no te define, entonces es hora de renovarla. Aprende cómo:

Solo colores neutrales. Lo primero que debes hacer es romper con los tonos neutrales a través de accesorios como pañuelos, relojes o camisas estampadas. Quienes usan solo colores apagados suelen asociarse con personalidades rutinarias y carentes de confianza personal.

Ropa grande e informal. Vestir ropa de otra talla puede significar que tengan una visión distorsionada de tu cuerpo. Por otro lado, un look demasiado informal puede transmitir que la persona pone por encima de sí misma las necesidades de la familia o el trabajo.

Look exclusivamente laboral. Si bien es importante tener varios looks para el trabajo, recuerda que también existen momentos del día en los que puedes jugar con tu vestuario y animarte a lucir otros estilos que te favorezcan. Más allá de los trajes convencionales, es importante tener un par de pantalones khaki, camisas de estampado moderno y lentes de sol para realzar el atuendo.

Debes considerar cambiar tu look entre los momentos de ocio y trabajo: si vistes únicamente traje de oficina, puede interpretarse como que solo te valoras por tu trabajo y no por tu vida personal. Otra opción es buscar un equilibrio y vestir prendas que funcionen para ambos momentos.