El cineasta estadounidense habló de su nueva cinta "Día de lluvia en Nueva York", su pelea con Amazon, las acusaciones de abusos sexuales y el movimiento #MeToo.
En los últimos meses, mucho se ha hablado sobre Woody Allen, luego de que resurgieran las acusaciones de su hija adoptiva, Dylan Farrow, quien asegura que este la tocó indebidamente a principios de 1990, cuando ella solo tenía siete años.
En entrevista con El País Semanal, Woody Allen habló sobre la posteridad y el legado que dejaría en la historia del cine.
"No me interesa mi legado, no me interesa lo que hagan con mis películas cuando ya no esté, como si las tiran al mar. Una vez que estás muerto, estás muerto. Se acabó. ¿Usted cree que cuando haya cerrado los ojos me importará si la gente ve mis películas o no? Lo sé, hay gente a la que sí le importa la posteridad. A mí me importa un pito. Y estoy seguro de que lo mismo le pasaba a Shakespeare", comentó a El País.
Además, agregó que su espíritu creativo hace que no se aburra. "Las hago porque hay gente que paga por ellas, que las financia. Y siempre que haya alguien dispuesto a financiarme, haré películas. Y cuando me digan que son terribles y que ya no me las financian, me dedicaré a escribir solo obras de teatro. Y si eso no funciona, escribiré libros", dijo.
Durante la presentación de "Día de lluvia en Nueva York" -comenta la periodista de El País-, la publicista del cineasta avisó que no se contestaría nada del proceso legal con Amazon. Allen interpuso una demanda de 68 millones de dólares contra la productora de su cinta número 50 por no estrenarla en Estados Unidos luego de que este diera declaraciones contra el movimiento #MeToo.
"Mire, echo la vista atrás, recuerdo mi vida y me siento como alguien tremendamente afortunado. Lo he sido siempre. He tenido buena salud. Tengo una mujer maravillosa. Hijos. Trabajo en algo que me encanta, adoro hacer películas y obras de teatro. Toco con mi banda de jazz por todo el mundo. Soy un afortunado y nada ha obstaculizado esa fortuna; tampoco todo esto que ha pasado, que es un error y una injusticia. Es una situación que está fuera de mi alcance, así que procuro concentrarme en mi trabajo y en mi familia. Pero eso no me impide pensar que la vida es una experiencia triste", dijo al ser cuestionado sobre si en el balance de su vida, pensará en las ausaciones de abusos sexuales que le interpusieron y el impacto que ha tenido esa situación en su estado de ánimo.
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