Gustavo Leaño, CEO de Niubiz, presentó en RPP su visión de un Perú con finanzas abiertas, mayor inclusión y menor uso de efectivo. Destacó el rol del BCRP y el avance de la empresa como habilitador de pagos e interoperabilidad en el ecosistema financiero.
Gustavo Leaño, CEO de Niubiz, se presentó en Negocios 360 por RPP y dio a conocer su proyección en cuanto al futuro financiero del Perú hacia un modelo de finanzas abiertas y mayor inclusión
El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) ha jugado un papel fundamental como "director de orquesta" en esta evolución. Leaño afirma que el BCRP ha definido la "ruta por la que debe atravesar Perú en pagos" y que el resto de los actores se han alineado a esta directriz por considerarla "tremendamente acertada".
La tendencia global y en Perú es hacia las finanzas abiertas (Open Finance), explica Leaño. Esto permitirá que "lleguen otro tipo de compañías especializadas en la originación de pagos" y ofrecerá servicios que se ajusten más a las necesidades de segmentos específicos de consumidores, promoviendo la "inclusión financiera completa".
El foco estratégico de Niubiz es consolidarse como un "habilitador del sistema de pagos en todo sentido". La compañía continuará siendo adquirente, pero también se proyecta como un gran procesador de pagos, ofreciendo su tecnología y experiencia operativa a otros agentes del ecosistema. El objetivo es ambicioso: "ojalá lleguemos en los próximos 2 a 3 años a los niveles de desarrollo que ya tiene, por ejemplo, Brasil", cuyo indicador de efectivo está entre el 14 % y 16 %, frente al 44 % de Perú.
Los desafíos para la plataforma de pagos
La informalidad de la economía es el principal detractor, con pequeños comercios temiendo la exposición ante la autoridad tributaria y los costos financieros. "Habrá que ver cómo se desarrolla una política tributaria acorde a ese segmento del mercado que sea lógica", señala Leaño. La reducción de costos, producto de la alta competencia promovida por las finanzas abiertas, también será crucial.
Actualmente, el 33 % de la población peruana aún no está vinculada a través de algún producto financiero al sistema de pagos, si se incluyen las billeteras digitales. Leaño sostiene que para que estas personas se integren, "necesitan incentivos" que deben venir de "políticas públicas".
De Visanet a Niubiz: ¿Cómo se dio el salto?
Niubiz nació como Visanet, una empresa creada por bancos peruanos para afiliar comercios y facilitar los pagos con tarjeta. En 2019, tras un cambio regulatorio, se transformó en Niubiz, convirtiéndose en un adquirente multimarca que acepta todas las tarjetas y otros métodos de pago.
Desde entonces, su misión ha sido clara: ampliar la red de comercios y acelerar la digitalización de la economía peruana. Con 28 años de historia, Niubiz ha sido importante en reducir el uso del efectivo: del 86 % en 2019 al 44 % en 2024, impulsando así la productividad y la competitividad del país.
Más allá de los terminales en tiendas, Niubiz también construyó la infraestructura que conecta las billeteras digitales del país. Gracias a esa red, apps como Yape y Plin pueden operar entre sí, lo que ha simplificado la vida de millones de usuarios. En 2024, se procesaron 10,000 millones de transacciones interoperables, un logro que demuestra la capacidad de Niubiz para adaptarse y liderar el cambio.
El liderazgo de Gustavo Leaño
Gustavo Leaño tiene una carrera en banca y medios de pago, con experiencia en Visa Colombia y como presidente de Credibanco. Hace casi tres años llegó al Perú para liderar Niubiz, en su primera experiencia profesional prolongada fuera de Colombia.
Destaca al talento peruano como profesional, orientado a resultados y similar al colombiano, aunque menos extrovertido. En Niubiz impulsa una cultura de alto rendimiento basada en la colaboración, la innovación y la mentalidad ganadora.
Su estilo de liderazgo se basa en la calma y el trabajo en equipo. Cree en enfrentar los problemas con serenidad, sin agravarlos, y enfocarse siempre en la causa raíz.
Fuera del trabajo, la música es su gran pasión. Desde niño canta y toca guitarra con su hermano gemelo, y durante la pandemia aprendió piano por su cuenta. Disfruta de boleros y baladas, y su hijo mayor también sigue ese camino musical.