Además de Menudo, la historia de la música ha sido testigo de la explotación y abusos hacia niños y adolescentes en otras famosas bandas.
La serie “Súbete a mi moto” hizo que volvieran a salir a la luz los maltratos físicos, explotación y abuso sexual del que eran víctimas los jóvenes integrantes de Menudo. Por más que se recuerden con nostalgia canciones como “Claridad” y “A volar”, no se puede pasar por alto el sufrimiento al que fueron expuestos los adolescentes.
El fenómeno musical que vivió la banda infantil puertorriqueña no fue el único en la historia. De hecho, se repitió una y otra vez al ser una fórmula de éxito para que un grupo alcance la fama entre el público más joven. No obstante, el lado oscuro de la industria se traduce en los maltratos físicos, verbales y psicológicos hacia algunos miembros.
Así es como recordamos otros nombres reconocidos como Parchis, Timbiriche y The Jackson 5; las cuales guardan una serie de secretos debajo de melodías atractivas e inocentes letras de canciones.
PARCHIS
En la década de los 80's, Yolanda, David, Tino, Gemma y Frank eran los cinco niños que componían la recordada Parchis. Cada uno vestido de un color y con cientos de ilusiones encima, ellos se convirtieron en uno de los grupos más exitosos de España. Incluso, llegaron a ser escuchados en Latinoamérica.
Netflix estrenó un documental sobre todo lo ocurrido detrás de bambalinas: adeudos, explotación y los desenfrenos entre los jóvenes cantantes. “Grabábamos la película por la mañana, y hacíamos dos sesiones de circo por la tarde durante prácticamente un mes”, reveló Oscar, quien fue la primera ficha azul en la historia de la banda infantil.
La madre de dicho integrante contó que los niños recibían una paga muy por debajo de lo que merecían por su extenuante trabajo. En la producción de la plataforma digital, se repasan los inicios de Parchis hasta su disolución en 1992. Así es como se expone la falta de supervisión a los menores en sus vidas como artistas y los posibles abusos que no han sido confirmados.
TIMBIRICHE
En México, nace Timbiriche durante la década de los 80's. Se sabe que los propios integrantes maltrataban a sus compañeros como un “derecho de piso”, es decir, los nuevos hacían lo que ellos dijeran para poder mantenerse en el grupo.
La agrupación mexicana estuvo conformada por nombres tan famosos como Mariana Garza, Benny Ibarra, Sasha Sokol, Alix Bauer, Diego Schoening, Erik Rubín, Paulina Rubio, Thalía, Edith Márquez, Eduardo Capetillo, entre otros. En conversación con People en Español, la intérprete de “Yo no soy esa mujer” confesó los constantes comentarios que recibía hacia su cuerpo.
“Yo me sentía el patito feo de Timbiriche... Era la más chica, la más flaquita y Benny me decía 'el cuerpo del mago', nada por aquí y nada por allá”, contó en el 2018. Recientemente dijo a Venga la alegría: “Tenían una edad perfecta para hacer bullying. El lema era ‘esta es la nueva, pues que se gane el lugar’. Yo sufrí un año, me hacían travesuras tontas, en aquel entonces por la edad que tenía, le daba más importancia; eran bromas muy pesadas”.
THE JACKSON 5
Otro de los casos que sacudió la industria de bandas infantiles fue The Jackson 5, la cual catapultó a Michael Jackson a la fama en Estados Unidos. A mediados de los 60's, muy pocos se imaginaban todo lo que se escondía detrás de las adorables canciones del género R&B, pop, soul y funk interpretadas por cinco hermanos.
Joe Jackson, patriarca de la familia, tenía claro lo que iba hacer con el talento de sus hijos: formar una banda y llegar al éxito. En eso centró toda su vida: Jermaine, Jackie, Tito, Marlon y Michael salieron de una pequeña ciudad de Indiana para ir de giras por todo EE.UU., donde habían encantado a miles con sus melodías y bailes que siguen presentes hasta la fecha.
En esta historia, también hay víctimas y nuevamente fueron los niños que tuvieron que sacrificar sus infancias para llevar vida de artistas. El padre de los hermanos Jackson no era simplemente la mente maestra detrás del grupo, sino que cometió todo tipo de abusos contra sus hijos. En vida, reconoció haber azotado a sus hijos con cables de interruptores y cinturones como castigo.
Comparte esta noticia