El sumo pontífice confirmó que visitará el Perú en enero de 2018. Se trata del máximo líder religioso que es también un fiel seguidor del San Lorenzo.
El socio número 88235N-0 de San Lorenzo es también el máximo líder religioso del mundo. Hablamos del papa Francisco, quien recientemente confirmó su visita al Perú para enero de 2018. La gira de Jorge Mario Bergoglio incluirá a Lima, Trujillo y Puerto Maldonado.
Después de la religión, la otra pasión del papa Francisco es el fútbol. "Quiero saludar de manera especial a los campeones de América, al equipo de San Lorenzo, que forman parte de mi identidad cultural", confesó el religioso argentino cuando recibió la visita de su equipo en el Vaticano. Los 'Cuervos' acababan de ganar la Copa Libertadores y viajaron hasta la santa sede para presentarle el trofeo al sumo pontífice.
Pero su cariño por este deporte se extiende a otros equipos. Es habitual verlo recibir a clubes de fútbol y reunirse con figuras de este deporte. En el Vaticano ha recibido a las selecciones de Argentina e Italia, y también a elencos como el Bayern Múnich. Además, cada tanto un seguidor le entrega la camiseta de un club. Incluso, un pequeño niño peruano le regaló una camiseta de Universitario en febrero de este año.
Tierno niño peruano le entrega su camiseta de la U al Papa. Ocurrió hoy en el Vaticano. Ojalá que Su Santidad interceda por el tío Challe. pic.twitter.com/wxKjWqWahD
— Pedro Eloy García (@PedroEloyG) 22 de febrero de 2017
Una anécdota futbolera. Sin embargo, si alguien le quiere regalar la remera de un club rival en Argentina, el sumo pontífice tiene ciertos reparos. Por ejemplo, hace algún tiempo un hincha de Boca Juniors se le acercó para pedirle una bendición para su equipo que se alistaba para enfrentar a San Lorenzo por la Supercopa de Argentina. El papa Francisco de forma muy educada rechazó la solicitud y atinó a bendecir "a todos los 'Cuervos' de corazón".
El hincha se quedó sorprendido y Jorge Mario Bergoglio le tomó la mano y le dijo: "con los Bosteros (Boca Juniors) nos llevamos no tan mal, peor con las Gallinas (River Plate)". Su bendición terminó siendo muy efectiva: San Lorenzo goleó 4-0 a los 'Xeneizes' y se quedaron con la copa.


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