Recuperemos al abanderado de la Selección Peruana [COLUMNA]

La regularidad de Yoshimar Yotun ha sido clave para que el equipo haya podido salir airosos en los diversos momentos del juego. Para competir ante Uruguay es vital que vuelva a tener un buen nivel.

En el fútbol, como en todo deporte colectivo, por lo general se impone quien puede trasladar a la práctica lo que en la pizarra quiere su técnico. Dentro de esa generalidad, pueden presentarse situaciones del juego que trastocan cualquiera tipo planificación: una inspiración individual, un gol rápido, etc.

Siendo lo más importante el colectivo, hay futbolistas bandera, quienes son los que sostienen lo programado, por capacidad y porque llevan el ADN de la forma de conducirse del equipo.

En el más alto rendimiento del Perú de Ricardo Gareca, quizá sin figurar tanto en el marcador, ese papel fue para Yoshimar Yotún. El hoy volante del Cruz Azul no sólo cumple labores de marca: despliegue, anticipación y cobertura. También funciones de distribución. Él decide cuando se acelera, se pone la pausa, cuando los pases son de conservación o entre líneas. Responsable que la conexión defensa – ataque sea dada con pulcritud.  En otras palabras, tiene el timón del equipo dentro de la cancha.

No es faltar a la verdad, decir que no anda bien en la Copa América. Impreciso, abusando de los balones largos y sin confianza. La inminente vuelta de Christian Cueva, detrás de Paolo Guerrero, puede ayudar a que Perú construya por abajo para progresar arriba, en el marcador. Es vital que mejore, lo necesitamos.