Entre las víctimas mortales hay un menor de edad, un futbolista y un camarógrafo de televisión.
Al menos diez personas murieron anoche y otras doscientas resultaron heridas en Siria por disparos durante la celebración de la victoria electoral del presidente Bachar al Asad, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Entre las víctimas mortales hay un menor de edad, un futbolista y un camarógrafo de la televisión por satélite Al Itiyah.
Los sucesos se produjeron en Damasco y Alepo (norte), así como en las provincias costeras de Latakia y Tartús, feudos del régimen de Al Asad.
La ONG acusó a "shabiha", milicianos progubernamentales, de ser los autores de los disparos.
Anoche, antes del anuncio de los resultados, el propio Al Asad solicitó en un comunicado a los ciudadanos contención.
En la nota, pidió que se evitaran los disparos al aire para no poner en peligro ninguna vida e instó a los sirios a manifestar "sus sentimientos nacionales de manera que reflejaran la civilización y su fuerte moral".
Al Asad ha sido reelegido en los comicios con un 88,7% de los votos, muy por delante de sus dos contrincantes, el diputado de la oposición tolerada Maher Abdel Hafez Hayar y el exministro Hasan Abdalá al Nuri.
La participación en las elecciones, celebradas el martes dentro de Siria y el 28 de mayo en las embajadas para los sirios residentes en el extranjero, fue del 73,42%.
La votación se desarrolló solo en las zonas controladas por el régimen y fue la primera con más de un candidato en medio siglo en Siria.
El Observatorio calificó las elecciones de "farsa" y afirmó que muchas familias fueron a sufragar ante el temor de ser detenidas por los leales al Gobierno si no lo hacían.
EFE
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