Es una costumbre popular usar prendas de amarillas durante el cambio de año, pero ¿sabe por qué se relaciona este color con la buena fortuna y de dónde viene la tradición?
Ropa íntima, piñatas, sombreros, anteojos, y un sinfín de objetos de color amarillo darán una tonalidad brillante al 2011. Aunque hemos adoptado sin objeciones esta costumbre (desde los abuelos de nuestros abuelo en más), muchos no estamos al tanto de su significado o su origen.
Para el conocido tarotista Francisco Choi, el amarillo simboliza el resurgimiento. “Es una nueva etapa como un nuevo año, el cambio de energía y una oportunidad para dejar atrás todo lo malo, los malestares, la injusticias y los resentimientos. Todo cambia con el color amarillo”, explica.
Aunque muchos objetos y amuletos de la cultura oriental mantienen dentro de su simbología el color amarillo, el origen de la tradición es occidental según el antropólogo y sociólogo Tito Castro. “Proviene de culturas pre-cristianas (las llamadas culturas paganas) y representa el sol. Por su origen agrícola significa un nuevo origen, el que amanezca todos los días”.
Castro asegura que al usar ropa interior amarilla le atribuimos un poder especial que puede ser sugestivo y provocar un cambio de actitud real, sobre todo por la intimidad que implican estas prendas.
Aún si usted no cree en esta cábala le deseamos un Año Nuevo color amarillo.
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