Los anticuchos son uno de los referentes más sabrosos de la gastronomía peruana y representa la esencia de una nación orgullosa de su tradición.
• Nota aparecida en SDP Noticias.com de México y tema a los anticuchos compuesto por el legendario dúo cubano "Los Compadres" de Cuba.
El anticucho, una brocheta de carne de corazón de res, de aroma incitante, asociado al concepto del criollismo, jarana, alegría y música se ha consolidado como uno de los platos predilectos de la gastronomía peruana.
Este plato de origen peruano que consiste en carne marinada en un aderezo especial a base de ají panca ensartada en un palito de caña y cocinada a la parrilla está considerado como uno de los más populares, al que sucumben peruanos de todos los estratos sociales.
Este es un plato obligado en fiestas y celebraciones populares y religiosas que no diferencia clase social alguna, mantiene orgullo por su propia historia, seduce, encanta, atrae y conquista aún a la mujer más bella.
En Perú, el consumo de anticucho es una tradición precolombina que se acentúa a inicios del virreinato y aumenta cuando se da la Procesión del Señor de los Milagros.
El anticucho, según expertos en gastronomía como Gastón Acurio, representa la esencia de una nación orgullosa de su tradición y las recetas que datan desde 1776 demuestran su linaje peruano por excelencia.
Fruto de hábiles manos de esclavas negras del Perú virreinal del siglo XVI, el anticucho es ahora consumido desde las bajas a las altas esferas sociales, desde los barrios populosos a zonas residenciales de multimillonarios peruanos.
Se cree que el término anticucho proviene del quechua antikuchu (anti: Andes, y kuchu: corte) o anti-uchu (uchu: potaje, mezcla) y la referencia a este plato aparece en textos españoles del siglo XVI, cuando los conquistadores llegaron a Perú.
En esa época, al anticucho se le agregaron ingredientes europeos, como el ajo y la carne de res, que remplazaría a la de llama, un auquénido sudamericano, u otros utilizados en la época del imperio Inca.
Los españoles trajeron esclavos negros, que se establecieron en Lima y en la costa del sur chico de la Ciudad de los Reyes del Virreinato del Perú. Ellos adoptaron este plato, o lo adaptaron del que ya comían en África.
• Por José Luis Castillejos. Corresponsal de Notimex
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