Se trata de peligrosas mujeres con gran poder en organizaciones criminales que por muchos años fueron más que un dolor de cabezas para las fuerzas del orden a nivel internacional.



El rol de las mujeres en el narcotráfico y el crimen organizado ya sea como “jefas”, líderes o sicarios, cada vez cobra mayor importancia, revelan fichas de búsqueda e investigaciones del gobierno federal de México y hasta en la DEA (Agencia Antidrogas de Estados Unidos).
Estas avezadas mujeres no solo accionan en el campo del narcotráfico, muchas de ellas también son sicarios, secuestradoras o están involucradas en el crimen de trata de personas.
Entre las mujeres fichadas por el gobierno federal de México y la DEA de Estados Unidos se cuentan al menos unas 50 mujeres que hasta la fecha no han sido capturadas.