El arquitecto Daniel Maguiña Roca, autor del libro 'Perú entre rieles', explicó en RPP que aunque estos trenes podrían mejorar el tránsito de personas, actualmente la infraestructura no está preparada para operar con pasajeros.
Más de 100 trenes -entre coches, galerías, locomotoras y contenedores de repuestos- están a punto de llegar desde California al puerto del Callao entre el 4 y 6 de julio.
En diálogo con RPP, el arquitecto Daniel Maguiña Roca, autor del libro 'Perú entre rieles', señaló que la llegada de esta infraestructura "va a ayudar" sobre todo los vagones y las locomotoras pero el punto de mira es el ciclo de proyectos, enfatizando que la falta de una infraestructura adecuada podría ser un obstáculo.
"Hay un proyecto de inversión donde está involucrado el Estado, que hay tres canales. Uno es una inversión directamente del Estado, dos puede ser una Asociación Pública y Privada, o puede ser obra por impuesto. [¿Es un donativo?] Lo que se está donando es el material rodante, no la infraestructura. La infraestructura hay que hacerla", señaló en Ampliación de Noticias.
En esa línea, Maguiña sostuvo que la red tendida no está preparada porque solo existe una línea de ida y vuelta. Por ello, necesitarían una segunda línea y mejoras significativas para hacer viable el transporte de pasajeros.
"[¿Por qué una segunda?] Lo que pasa es que la frecuencia es diferente. Han avanzado los años y la zona de esta intervención ya es urbana. No es una zona, digamos, donde los trenes que pasaban antes eran trenes turísticos que se iban a Huancayo y paraban en Ricardo Palma o en Chosica. Ahora, ¿a qué voy? Que los trenes realmente sí van a ser útiles, pero hay que crear la infraestructura. Habría que ver en qué estado está [vía Lima-Chosica] porque a la fecha nadie ha hecho un diagnóstico de su real valía", añadió.
"Lo que pretende, creo, el alcalde de Lima es colocar el material rodante en los vagones, dar servicio en la mañana, en la tarde, un ida y vuelta, llevar a los pasajeros que se puedan. Se pueden crear varios convoys, pueden ir y venir en horas punta. Pero va a crear un problema en los cruces, porque va a tener que parar. Por ejemplo, yo voy a ir con mi tren de la mañana de Chosica a Lima y las intersecciones, ¿cómo hago? Por ejemplo, en Ñaña, en Huampaní o Chaclacayo. La gente cruza constantemente con su carro, cruzan a pie. Ahí va a tener que parar todo. Porque en la mañana pueden pasar dos o tres convoys, posiblemente con cinco o seis vagones, con sus locomotoras, y eso distribuido posiblemente en 15 minutos de circulación. En ese momento hay que parar. La única manera de parar es poniendo un semáforo peatonal personal", añadió.
Sobre agregar vías a desnivel, sostuvo que es parte de la infraestructura que debe realizarse, donde ejemplificó el caso de la ruta desde el Callao hasta Ricardo Palma —que deberían hacerse estaciones y los mencionados pasos a desnivel, así como puentes para que el tren pueda circular libremente— con la Línea 1 del Metro de Lima en el paradero hasta Villa El Salvador.
Para proceder con la inversión, sostuvo que debe realizarse un perfil a través de un convenio donde debe intervenir el MTC, la ATU y la concesionaria, "porque los tres tienen que ver en este tema". "¿Qué es lo que quiere hacer la municipalidad?, ¿poner el operativo?, ¿se va a hacer cargo de la obra? Esa es una obra que yo calculo en unos mil millones de dólares", agregó en RPP.
Por otro lado, informó que la propuesta de un tren que conecte Lima con Ica está en proceso con un presupuesto de 6 500 millones de dólares, esperando definición en agosto sobre con qué país se trabajará este proyecto, que se encuentra a cargo de ProInversión.