Municipalidad de Lima cuenta con 80 fiscalizadores, los cuales supervisan el cumplimiento de la medida, así como la orientación de transportistas para que respeten el ordenamiento vehicular.
Una multa de 720 soles se aplicará a partir del lunes 19 de diciembre a los transportistas que recojan o dejen pasajeros en paraderos no autorizados de la avenida Abancay, informó la Municipalidad de Lima.
La gerente de Transporte Urbano de la comuna capitalina, María Jara, señaló que la multa está contemplada en las normas vigentes, pero expresó su confianza en que los conductores y las empresas de transporte público acaten el ordenamiento vehicular para no ser amonestados.
“Creo que la gran mayoría de empresas y sus choferes está asimilando los cambios ejecutados por la municipalidad y no se expondrán a una multa”, dijo en conversación con la Agencia Andina.
Enfatizó que la fiscalización será permanente hasta que se consolide como buena práctica el correcto traslado en el transporte público y vehicular en general.
Jara refirió que la Gerencia de Transporte Urbano del municipio de Lima cuenta con 80 fiscalizadores, los cuales iniciaron esta semana las tareas de supervisión del cumplimiento de la medida, así como la orientación de transportistas y público para que todos respeten el ordenamiento vehicular.
Un grupo de fiscalizadores se encarga de orientar a los conductores y público en general, mientras que otro fiscaliza el cumplimiento del respeto a la ubicación de los paraderos, el tiempo de recojo y desembarco de pasajeros, y la circulación por los carriles autorizados.
Se han establecido tres tipos de paraderos identificados con las letras A, B y C.
Los paraderos con la letra A están autorizados para las rutas SO, IO, IM y EM; mientras que en los paraderos tipo B lo harán las rutas OO, NO, NM y EO. En el paradero C podrán recoger y dejar pasajeros todas las rutas que circulan por ese corredor vial.
El tiempo de espera promedio en estos paraderos es de 15 segundos, aunque se tomará en cuenta los casos en que los pasajeros tengan alguna discapacidad o si hay una cantidad grande que sube o baja del vehículo de transporte urbano.
En cuanto a los carriles, el de la derecha está diseñado para las unidades de transporte público y el de la izquierda para los vehículos privados.
“Todos debemos colaborar para que estas medidas tengan éxito y dejemos atrás el desorden, la informalidad y la congestión que han caracterizado por mucho tiempo a nuestro transporte en la ciudad”, remarcó Jara.
Andina
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