Emotivo testimonio del periodista deportivo, Manuel Paz Aráoz quien pudo contarse entre las 350 víctimas del Estadio Nacional de aquel 24 de mayo de 1964, que enlutó al deporte.
Es considerada la tragedia más grande de su tipo en esta parte del mundo. El periodista deportivo Manuel Paz Aráoz recordó cómo se salvó de morir en el Estadio Nacional, aquella tarde del 24 de mayo de 1964.
Por Dennis Álvaro
“Tenía doce años. Aquel día y, como siempre me gustó el fútbol, le pedí a mi madre que me lleve al estadio, a ver el Perú-Argentina, que se jugaba para obtener la clasificación a las Olimpiadas de Tokyo de ese año”, recuerda Paz. “No pudimos entrar por que ya las entradas estaban agotadas”.
Su madre entonces decidió comprar dos entrada que se revendían, pero como las habían subido de precio, solo le alcanzaba para comprar una. “Hijo, entra tú y yo te espero hasta que termine el partido”, le dijo la madre con cariño y desprendimiento al saber el interés del muchacho.
El adolescente Manuel, sin embargo, no aceptó ese sacrificio y le dijo a su mamá que no, mejor era volver a casa. En el camino de retorno, sin embargo, decidieron tomarse un lonche en una cafetería a la espalda del estadio y la pasaron escuchando el primer tiempo por la radio.
Ya en casa, mientras seguía el desarrollo del partido, el futuro periodista deportiva se informó del gol anulado a “Kilo” Lobatón y la iracunda reacción de las tribunas, que repudiaron la actitud del árbitro uruguayo que evidentemente favorecía a sus vecinos argentinos.
Faltaban siete minutos para que termine el partido y el “Negro Bomba” –cuyo apelativo estará íntimamente ligado con esta gran tragedia- bajó precipitadamente de la Tribuna Sur y corrió con el evidente afán de masacrar al árbitro. No logró su objetivo porque fue derribado por cuatro guardias de asalto.
El “Negro Bomba”, que era conocido en los bajos fondos por ser guardián de los concurridos burdeles del Callao, opuso tenaz resistencia por su enorme fortaleza física, pero recibió una lluvia de palos y, otra vez en el suelo, fue molido a patadas por los policías.
Las tribunas aullaban de cólera y otras decenas de sujetos bajaron de la tribuna sur para enfrentarse a la policía, ordenando el oficial de guardia, el tristemente célebre comandante De Azambuja, que se disparen bombas lacrimógenas contra las tribunas, especialmente las del lado sur.
Una estampida humana trató de escapar del estadio y, apretujados entre las puertas cerradas, murieron cientos de aficionados. En represalia, los hinchas que lograron salir con vida reaccionaron brutalmente y asesinaron a golpes a todos los policías uniformados que encontraban a su paso.
Manuel Paz escuchó toda la noche los relatos de esta hecatombe y, pasados cincuenta años, no puede dejar de recordar que pudo estar entre esos infortunados hinchas, pero se salvó al no querer dejar a su madre para ingresar a la Tribuna Sur.
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MÁS ALLÁ DE LAS CANAS es un programa que se trasmite por RPP Noticias los sábados desde las 7:00 Pm con la conducción de Miguel Humberto Aguirre.
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