China mantiene una actitud flexible con el vecino régimen estalinista, aunque el ensayo nuclear de mayo fue considerado como una traición por Pekín.
China espera que los países comprometidos con la resolución de la crisis norcoreana "mantengan la calma y la contención" tras los siete misiles lanzados el sábado por Pyongyang, señaló hoy el portavoz de turno del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Qin Gang.
El lanzamiento balístico de ayer volvió a provocar una reacción de condena internacional, después de que el régimen liderado por Kim Jong-il fuera sancionado por la ONU por su segundo ensayo nuclear, llevado a cabo el 25 de mayo pasado.
Sin embargo, el portavoz Qin señaló que su gobierno es consciente del lanzamiento, y espera que las partes concernidas "trabajen juntos para mantener la paz regional y la estabilidad", según un comunicado difundo hoy.
China, gobernada por el Partido Comunista desde hace seis décadas, mantiene una actitud flexible con el vecino régimen estalinista, al que apoya internacionalmente y suministra la mayor parte de la energía que consume, aunque el ensayo nuclear de mayo fue considerado como una traición por Pekín.
El régimen chino intenta desde 2003 mediar en la crisis nuclear norcoreana mediante un diálogo en el que también participan ambas Coreas, EEUU, Rusia y Japón, y que arrancó de Pyongyang el compromiso de desarme a cambio de ayuda, pero las negociaciones se estancaron a finales de 2008.
Según fuentes surcoreanas, Corea del Norte lanzó el sábado siete misiles de medio alcance (400-500 kilómetros) con el fin de "mejorar la precisión" de su sistema balístico.
El lanzamiento se llevó a cabo en la costa este, desde una base cercana a Wonsan, en la provincia de Gangwon. EFE
El lanzamiento balístico de ayer volvió a provocar una reacción de condena internacional, después de que el régimen liderado por Kim Jong-il fuera sancionado por la ONU por su segundo ensayo nuclear, llevado a cabo el 25 de mayo pasado.
Sin embargo, el portavoz Qin señaló que su gobierno es consciente del lanzamiento, y espera que las partes concernidas "trabajen juntos para mantener la paz regional y la estabilidad", según un comunicado difundo hoy.
China, gobernada por el Partido Comunista desde hace seis décadas, mantiene una actitud flexible con el vecino régimen estalinista, al que apoya internacionalmente y suministra la mayor parte de la energía que consume, aunque el ensayo nuclear de mayo fue considerado como una traición por Pekín.
El régimen chino intenta desde 2003 mediar en la crisis nuclear norcoreana mediante un diálogo en el que también participan ambas Coreas, EEUU, Rusia y Japón, y que arrancó de Pyongyang el compromiso de desarme a cambio de ayuda, pero las negociaciones se estancaron a finales de 2008.
Según fuentes surcoreanas, Corea del Norte lanzó el sábado siete misiles de medio alcance (400-500 kilómetros) con el fin de "mejorar la precisión" de su sistema balístico.
El lanzamiento se llevó a cabo en la costa este, desde una base cercana a Wonsan, en la provincia de Gangwon. EFE
Comparte esta noticia