Pese al frío reinante en la zona, Yanli exhortó a los alumnos y profesores a que fueran al patio de recreo. Dos horas después los edificios quedaron en ruinas.
Un profesor que aseguró haber presentido la llegada del terremoto de la semana pasada en la provincia de Qinghai (oeste de China) y por ello dio orden de desalojar los dormitorios de su instituto, salvó así la vida de los más de 830 alumnos y maestros del centro que dormían allí, contó hoy la prensa oficial.
El maestro, llamado Yanli Duode y de etnia tibetana, se despertó dos horas antes del seísmo de 7,1 grados que causó más de 2.000 muertos, e intuyó que los alumnos estaban en peligro, por lo que decidió despertar a todo el edificio y ordenar un rápido desalojo.
Posiblemente el profesor despertó por un temblor previo al gran terremoto, aunque el ahora heroico Yanli no lo tiene del todo claro.
"Sentí que algo malo iba a pasar pero no podía especificar exactamente qué, me sentía terriblemente mal", declaró al diario "China Youth Daily".
Pese al frío reinante en la zona, Yanli exhortó a los alumnos y profesores a que fueran al patio de recreo, una sabia decisión ya que menos de dos horas después el edificio donde estaban durmiendo los chicos se derrumbó y el de las chicas y el de maestros sufrieron graves daños.
En el momento del seísmo sólo tres chicos estaban dentro del edificio: dos que hacían labores de limpieza, y que también fueron salvados por un profesor que entró para sacarlos de allí, y un alumno rezagado que también se salvó, saltando por una ventana desde un primer piso.
El diario "South China Morning Post" destacó lo milagroso de que en aquel internado no se produjera ninguna víctima, cuando en muchos otros centros educativos del área hubo gran número de fallecidos, como también ocurrió en 2008 en el seísmo de la vecina provincia de Sichuan (más de 5.000 estudiantes murieron en aquella ocasión).
Expertos consultados por la prensa china señalaron que el caso del profesor Yanli no tiene nada de sobrenatural, ya que los temblores previos a un gran terremoto son muy habituales.
Así, el geólogo Zhang Yuanzhi subrayó que debe causar especial alarma notar un temblor en un lugar donde durante años no se hayan producido terremotos, y por ejemplo en el caso de Yushu (epicentro del seísmo de la pasada semana) no se habían notado grandes movimientos sismológicos en dos décadas.
El derrumbe de cientos de escuelas e institutos en el terremoto de Sichuan de 2008 abrió el debate sobre la pésima construcción de los centros educativos en China, ya que en algunas ciudades afectadas por aquel seísmo fueron precisamente esos edificios los que sufrieron más daños y víctimas. EFE
El maestro, llamado Yanli Duode y de etnia tibetana, se despertó dos horas antes del seísmo de 7,1 grados que causó más de 2.000 muertos, e intuyó que los alumnos estaban en peligro, por lo que decidió despertar a todo el edificio y ordenar un rápido desalojo.
Posiblemente el profesor despertó por un temblor previo al gran terremoto, aunque el ahora heroico Yanli no lo tiene del todo claro.
"Sentí que algo malo iba a pasar pero no podía especificar exactamente qué, me sentía terriblemente mal", declaró al diario "China Youth Daily".
Pese al frío reinante en la zona, Yanli exhortó a los alumnos y profesores a que fueran al patio de recreo, una sabia decisión ya que menos de dos horas después el edificio donde estaban durmiendo los chicos se derrumbó y el de las chicas y el de maestros sufrieron graves daños.
En el momento del seísmo sólo tres chicos estaban dentro del edificio: dos que hacían labores de limpieza, y que también fueron salvados por un profesor que entró para sacarlos de allí, y un alumno rezagado que también se salvó, saltando por una ventana desde un primer piso.
El diario "South China Morning Post" destacó lo milagroso de que en aquel internado no se produjera ninguna víctima, cuando en muchos otros centros educativos del área hubo gran número de fallecidos, como también ocurrió en 2008 en el seísmo de la vecina provincia de Sichuan (más de 5.000 estudiantes murieron en aquella ocasión).
Expertos consultados por la prensa china señalaron que el caso del profesor Yanli no tiene nada de sobrenatural, ya que los temblores previos a un gran terremoto son muy habituales.
Así, el geólogo Zhang Yuanzhi subrayó que debe causar especial alarma notar un temblor en un lugar donde durante años no se hayan producido terremotos, y por ejemplo en el caso de Yushu (epicentro del seísmo de la pasada semana) no se habían notado grandes movimientos sismológicos en dos décadas.
El derrumbe de cientos de escuelas e institutos en el terremoto de Sichuan de 2008 abrió el debate sobre la pésima construcción de los centros educativos en China, ya que en algunas ciudades afectadas por aquel seísmo fueron precisamente esos edificios los que sufrieron más daños y víctimas. EFE
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