En documento se recomienda al Departamento de Estados eliminar la política que impide a las mujeres soldados combatir directamente sobre el terreno.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos debería eliminar una política que impide todavía a las mujeres soldados combatir directamente sobre el terreno, según las recomendaciones preliminares contenidas en informe publicado hoy.
El documento ha sido elaborado por la Comisión para la Diversidad en el Liderazgo Militar (MLDC, por su sigla en inglés), que fue creada en 2009 por el Congreso de EE.UU. y en la que participan militares activos y retirados.
En su informe, la comisión recomienda al Pentágono que "elimine la política de exclusión del combate para mujeres".
Las actuales políticas de Servicios y del Departamento de Defensa que prohíben a las mujeres ocupar puestos y asignaciones de combate directo se aplican desde principios de 1990, según la Comisión.
El Departamento de Defensa indicó en un comunicado que revisará las recomendaciones de la comisión cuando el informe esté completado y definitivo, previsiblemente en marzo.
En principio, el Congreso revocó las leyes de exclusión para el combate en la Ley de Autorización para la Defensa Nacional, de 1994.
No obstante, cualquier cambio que quieran introducir las distintas ramas o servicios de las Fuerzas Armadas en su política actual de asignaciones debe ser revisado por el Parlamento, explicó hoy el portavoz del Departamento de Defensa, Dave Laplan.
Así, cuando la Marina de EE.UU. cambió recientemente su política que prohibía a las mujeres formar parte de las tripulaciones de submarinos, esa nueva política tuvo que informar al Congreso.
En concreto, el Ejército de EE.UU. prohíbe actualmente a las mujeres servir en unidades de combate si son más pequeñas que una brigada y si su misión principal es la lucha directa.
Las mujeres no pueden participar en ciertas asignaciones de combate en todas las Fuerzas Armadas, pero las restricciones más duras existen en el Ejército y en la Infantería de Marina.
Los que se oponen a que las mujeres ocupen puestos de combate alegan que su presencia dificulta la eficacia de las misiones y dañan la moral y la cohesión de la unidad.
Ese mismo argumento se ha utilizado para evitar que se derogue la ley "Don"t Ask Don"t Tell" (No preguntes, no lo digas), que prohibía a los homosexuales declarados servir en las Fuerzas Armadas de EE.UU.
El 22 de diciembre pasado el presidente de EE.UU., Barack Obama, promulgó la abolición de esa ley, que databa de 1993.
En cualquier caso, la comisión recomienda al Pentágono aplicar un posible cambio por "fases".
Las mujeres soldados son el 14,6 por ciento del contingente del Ejército de Tierra en activo. El 19,2 por ciento sirve en la Fuerza Área y el 7,5 por ciento en la Infantería de Marina. EFE
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