La tormenta tropical Florence, que carga vientos máximos de 110 km por hora, tendrá un "gradual fortalecimiento" para convertirse de nuevo en huracán informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
La tormenta Florence, que se degradó el viernes a tormenta tropical, se fortalecerá en las siguientes horas hasta volverse un huracán e incluso la próxima semana uno de categoría mayor, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
Florence carga vientos máximos sostenidos de 110 km por hora y tendrá un "gradual fortalecimiento" para convertirse de nuevo en huracán y alcanzar a comienzos de la próxima semana la categoría 3 en la escala Saffir-Simpson, es decir un huracán de categoría mayor.
La tormenta tropical, que tiene en alerta a las autoridades del sureste de Estados Unidos, se encuentra a 1.120 kilómetros al noreste del norte de las islas de Sotavento (Antillas Menores) y a 1.305 kilómetros al sureste de las Bermudas, indicó el NHC en su boletín vespertino.
La tormenta Florence
El sistema, que se halla en medio del Atlántico y no representa riesgo para zonas pobladas, ha reducido su desplazamiento en las últimas horas hasta llegar a los 7 km/hora con dirección oeste y se prevé mantenga esta trayectoria a lo largo del fin de semana.
Se espera luego un giro rumbo al oeste-noroeste, acompañado de un aumento de la velocidad de su desplazamiento. "En la trayectoria prevista, el centro de Florence se moverá sobre el suroeste del Océano Atlántico, entre las Bermudas y las Bahamas, el martes y el miércoles, y se acercará a la costa sureste de EE.UU. el jueves", indicó el NHC, con sede en Miami.
Florence fue el primer huracán de categoría mayor que se formó en la actual temporada ciclónica del Atlántico. Los meteorólogos estadounidenses pronosticaron el pasado 9 de agosto una temporada de huracanes en el Atlántico un 60 % por debajo de lo normal.
El pronóstico de la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA) prevé cinco huracanes en la cuenca del Atlántico y solo uno de ellos de las categorías más destructivas. En la actual temporada de huracanes en el Atlántico se han formado siete tormentas tropicales, de las cuales Beryl, Chris y Florence se convirtieron en huracanes.
(Con información de EFE)
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