Primer ministro israelí sostuvo que la zona en que viven es inestable. No obstante, expresó su esperanza por que retornen calma y seguridad en la región.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, expresó hoy su esperanza de que la "calma" y la "estabilidad" regresen a la región, a raíz de los disturbios estos últimos días en Túnez.
"La zona en la que vivimos es inestable", dijo Netanyahu al inaugurar hoy la sesión semanal del Consejo de Ministros, "todos podemos ver cuántos focos de gran inestabilidad hay en nuestra zona geográfica".
"Espero que la calma y la seguridad regresen a la zona", agregó el primer ministro sobre la situación en ese país árabe, con el que Israel mantenía contactos diplomáticos de bajo nivel.
Israel y Túnez no llegaron a establecer nunca relaciones diplomáticas pero a mediados de los noventa, en coincidencia con el proceso de paz de Oslo, llegaron a abrir oficinas mutuas de representación.
Durante la Segunda Intifada (2000-2005) Túnez sancionó las relaciones pero en 2005 a raíz de la evacuación israelí de la franja de Gaza ambos gobiernos volvieron a acercarse.
A diferencia de la mayoría de los gobiernos árabes, que prohíben la entrada a su territorio de ciudadanos israelíes, el del ya ex presidente Zine el Abidine Ben Alí permitía estas visitas y miles de israelíes, entre ellos los de origen tunecino, visitaron ese país magrebí en los últimos años.
Al estallar los disturbios hace unos días dos grupos de esta nacionalidad se encontraban en Túnez, informa hoy el diario Yediot Aharonot.
Uno de ellos abandonó el país antes de agravarse la situación que condujo al exilio al presidente Ben Alí y al cierre del espacio aéreo tunecino, y el otro fue evacuado el sábado a través de Alemania cuando se reabrió.
EFE