Las cintas revelan que el ex presidente de Estados Unidos, Richard Nixon planeaba debilitar la imagen de Kennedy, descubriendo si el fallecido engañaba a su esposa.
El ex presidente de EE.UU. Richard Nixon contrató a agentes secretos para descubrir si el recién fallecido senador Ted Kennedy engañaba a su esposa y frenar así una posible carrera hacia la Casa Blanca, revelan hoy medios estadounidenses.
El espionaje de Nixon sobre Kennedy salió a la luz tres días después de que el veterano senador muriera a raíz de un cáncer cerebral, a través de las cintas que el propio ex mandatario grabó de las conversaciones con sus asesores en la Casa Blanca.
En plena campaña por la reelección en 1972, Nixon, que había perdido las elecciones de 1960 contra John F. Kennedy, temía que el misticismo de ese apellido volviera a truncar sus aspiraciones políticas, esta vez a través de la figura del prestigioso senador por Massachusetts.
"¿Tienes a alguien en el servicio secreto del que puedas servirte?", pregunta Nixon a su asesor John Ehrlichman, en una de las cintas en las que el propio líder republicano grabó sus conversaciones más importantes entre 1971 y 1973, publicadas en la página web nixontapes.org.
Las cintas revelan que Nixon, que ocupaba el Despacho Oval desde 1969, tenía en mente debilitar la imagen de Edward Kennedy destapando una historia similar a la de Chappaquiddick, que había manchado la carrera del senador tres años antes.
Aquel episodio marcó al joven demócrata cuando regresaba de una fiesta junto a su secretaria, Mary Jo Kopechne, y su vehículo se precipitó a un canal.
Su acompañante murió asfixiada, y Kennedy, que abandonó el lugar, no dio parte a la Policía hasta el día siguiente, una actitud a la que muchos atribuyen el fracaso de su candidatura a la Presidencia en 1980, cuando fue derrotado en las primarias demócratas por Jimmy Carter.
Aunque en las elecciones de 1972 Kennedy dejó vía libre a George McGovern debido a "preocupaciones familiares", Nixon no dudó en hacer que las conexiones en el servicio secreto de Ehrlichman siguieran cada uno de sus movimientos durante unas vacaciones en Hawai y en Martha"s Vineyard (Massachusetts).
Además de descubrir algún desliz que desestabilizara la imagen de su matrimonio con Joan Kennedy, Nixon pretendía cubrirse las espaldas ante la posibilidad de que el senador compartiera el destino de su hermano, asesinado en 1963.
La decepción de Nixon fue evidente cuando lo más escandaloso que pudieron contarle los agentes fue que Kennedy había prohibido a su mujer llevar unos "shorts" muy cortos a una gala en la Casa Blanca.
"Está totalmente limpio", dijo Ehrlichman. "Se fue a Hawai solo. Se quedó en la casa de un hombre, y fue el hombre más correcto del mundo todo el tiempo".
EFE
El espionaje de Nixon sobre Kennedy salió a la luz tres días después de que el veterano senador muriera a raíz de un cáncer cerebral, a través de las cintas que el propio ex mandatario grabó de las conversaciones con sus asesores en la Casa Blanca.
En plena campaña por la reelección en 1972, Nixon, que había perdido las elecciones de 1960 contra John F. Kennedy, temía que el misticismo de ese apellido volviera a truncar sus aspiraciones políticas, esta vez a través de la figura del prestigioso senador por Massachusetts.
"¿Tienes a alguien en el servicio secreto del que puedas servirte?", pregunta Nixon a su asesor John Ehrlichman, en una de las cintas en las que el propio líder republicano grabó sus conversaciones más importantes entre 1971 y 1973, publicadas en la página web nixontapes.org.
Las cintas revelan que Nixon, que ocupaba el Despacho Oval desde 1969, tenía en mente debilitar la imagen de Edward Kennedy destapando una historia similar a la de Chappaquiddick, que había manchado la carrera del senador tres años antes.
Aquel episodio marcó al joven demócrata cuando regresaba de una fiesta junto a su secretaria, Mary Jo Kopechne, y su vehículo se precipitó a un canal.
Su acompañante murió asfixiada, y Kennedy, que abandonó el lugar, no dio parte a la Policía hasta el día siguiente, una actitud a la que muchos atribuyen el fracaso de su candidatura a la Presidencia en 1980, cuando fue derrotado en las primarias demócratas por Jimmy Carter.
Aunque en las elecciones de 1972 Kennedy dejó vía libre a George McGovern debido a "preocupaciones familiares", Nixon no dudó en hacer que las conexiones en el servicio secreto de Ehrlichman siguieran cada uno de sus movimientos durante unas vacaciones en Hawai y en Martha"s Vineyard (Massachusetts).
Además de descubrir algún desliz que desestabilizara la imagen de su matrimonio con Joan Kennedy, Nixon pretendía cubrirse las espaldas ante la posibilidad de que el senador compartiera el destino de su hermano, asesinado en 1963.
La decepción de Nixon fue evidente cuando lo más escandaloso que pudieron contarle los agentes fue que Kennedy había prohibido a su mujer llevar unos "shorts" muy cortos a una gala en la Casa Blanca.
"Está totalmente limpio", dijo Ehrlichman. "Se fue a Hawai solo. Se quedó en la casa de un hombre, y fue el hombre más correcto del mundo todo el tiempo".
EFE
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