Entre los participantes estuvo un menor de edad que no soportó y tuvo que ser asistido antes de tiempo. El ritual simbólico fue parte de la 'Marcha por la Paz'
Como parte de una manifestación denominada 'Marcha por la Paz y la Justicia', el padre Jesús Olmedo ordenó la crucifixión simbólica de cinco creyentes. El hecho ocurrió en Humahuaca, una ciudad en la provincia de Jujuy, Argentina.
Según informó el portal RT, había un niño de nueve años dentro de los participantes. Lo ataron, junto a los otros, a un palo de madera y ataron sus extremidades con sogas. Sin embargo, no resistió la rudeza de este castigo y tuvo que ser bajado antes del tiempo previsto.
La respuesta. Todo esto ocurría mientras el padre Olmedo realizaba una homilía en la plaza central de Humahuaca. Al oír el llanto del menor, paró la liturgia. Luego dijo que las lágrimas del pequeño se debían al frío y a que "los hombres también lloran".
Según explicó el religioso, la madre del menor y los otros participantes habían autorizado la protesta y la 'crucifixión'. "Fue un acto hermoso, todos quedaron encantados", dijo el cura tras el evento. Contrariamente, en redes sociales hubo comentarios de desaprobación para este hecho.
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