La única hija del magnate Aristóteles Onassis falleció en un club campestre de Buenos Aires pocas horas después de comprometerse con el que iba a ser su quinto esposo.
La muerte de Christina Onassis, víctima de un edema pulmonar el 19 noviembre de 1988 en Buenos Aires (Argentina), todavía sigue sin aclararse.
Christina tenía 37 años y era la única hija del magnate naviero Aristóteles Onassis. Murió sola en un baño de un club campestre de la capital de Argentina horas después de haberse comprometido con el amor de su vida.
Tragedia Onassis
La vida millonaria de Christina estuvo plagada de tragedias. En 1973 murió su hermano Alexander en un accidente de avión con apenas 24 años, al siguiente año perdió a su madre por una sobredosis de drogas y meses después, en 1975, a su padre: Aristóteles Onasis por enfermedad.
Tras la muerte de Aristóteles Onassis, su fortuna, valorada en unos 500 millones de dólares, fue dividida en dos según su testamento. Una parte fue destinada a una fundación y la otra a Christina.
La millonaria heredera tuvo cuatro matrimonios que terminaron en divorcio y fue diagnosticada a los 30 años de depresión clínica. A los 37 años hizo su último viaje por amor: se iba a comprometer en secreto en Buenos Aires con el empresario argentino Jorge Tchomlekdjoglou.
Tras una cena en un club campestre con su prometido, Christina se despidió para ir a dormir. Fue la última vez que la vieron viva. Christina Onassis fue encontrada muerta en la bañera. La autopsia determinó que murió a causa de un edema pulmonar.
"¿Qué quiere decir edema pulmonar?, ¿cómo se produjo?, ¿por qué su corazón no pudo resistir cuando su médico afirmaba que latía más fuerte que un toro?", afirmó el presidente de la Fundación Onassis, Stelios Papadimitriu, cuando fue entrevistado por la AFP en 1997. Entre las teorías alternativas para su muerte incluso está la del envenenamiento.
La única hija de Christina, Athina Roussel (1985), heredó una fortuna estimada en US$ 2,700 millones.
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