“Fue casi una pelea callejera”: insultos, interrupciones y pocas propuestas se vieron en el primer debate presidencial de EE.UU.

Este martes se realizó el primer debate de cara a las elecciones presidenciales de Estados Unidos 2020. Donald Trump y Joe Biden tuvieron un fuerte careo en la hora y media que duró este evento televisado.

El enfrentamiento de ideas terminó convirtiéndose en un enfrentamiento político que llegó incluso a temas personales. En palabras del internacionalista Ramiro Escobar a RPP, “fue casi una pelea callejera, una suerte de bronca personal alentada casi por Donald Trump”.

El mandatario estadounidense no respetó el tiempo de Biden y “Biden cayó en esto”, opina Escobar. “Esto debía de ser un debate de posiciones políticas y propuestas, pero creo que más de la mitad del debate lo pasaron peleando”.

Donald Trump fue el que más faltas de respeto tuvo contra Joe Biden. Esta actitud del magnate no es novedad; sin embargo, se esperaba más de un vigente mandatario. “Es lamentable que el propio presidente no sepa guardar los modales”, sostiene Escobar.

Para el internacionalista Farid Kahhat el debate fue “uno donde las dos partes salieron perdiendo en medio de lo caótico y deslucido que fue”. En su opinión, el debate debía de ser mejor aprovechado por Trump, quien se encuentra desfavorecido por la últimas encuestas.

“Por eso buscó ser agresivo, pero terminó viéndose desesperado”, es así que el moderador, el periodista de Fox News Chris Wallace, tuvo que llamarle en reiteradas veces la atención por interrumpir.

Sin embargo, Kahhat considera que esto no significa que Joe Biden haya tenido un desempeño destacado, al contrario, fue “gris y monocorde”. Escobar también coincide en que “Biden no tuvo muchas propuestas concretas sobre la pandemia. El debate ya se había degradado a estas alturas” del tema de la pandemia de la COVID-19.

El panorama aún es incierto. Quedan cinco semanas para que se realicen las elecciones en Estados Unidos, un país que atraviesa por grandes conflictos. Social, tras las últimas protestas de abuso y aparente racismo policial. Económico, tras los constantes enfrentamiento con China. De salud, tras las últimas cifras mundiales que sitúan al país con el mayor número de decesos por la COVID-19 (más de 206 mil) y el mayor número de contagios (más de 7 millones).