Snapshot, una tecnología que recrea rostros a partir de muestras de ADN, permitió elaborar una imagen de cómo luciría hoy el presunto asesino.
La Policía de Newport Beach en California (Estados Unidos) recordó el 45 aniversario del asesinado de Linda Ann O’Keefe. La niña de 11 años fue vista con vida por última vez el 6 de julio de 1973 cuando caminaba a casa luego de sus clases de verano.
Ese viernes en la tarde, Linda llamó a su mamá para que la recoja, pero ella le pidió que camine a casa porque estaba ocupada con un proyecto de costura. Camino a su casa fue que una mujer la vio abordando una furgoneta de color turquesa.
El vestido de la niña que murió estrangulada, una de las pistas clave.
Su cuerpo fue descubierto al día siguiente en una granja, pero su asesino nunca fue atrapado. Sin embargo, el ADN podría ayudar a resolver el caso.
El departamento de Policía tuiteó todo el 6 de julio para darle una voz a la niña. Además, compartió fotografías originales de la investigación y una imagen de su presunto asesino, producto de Snapshot, una nueva tecnología que recrea rostros a partir del ADN.
La esperanza del ADN
Las autoridades estadounidenses detuvieron en abril a un hombre sospechoso de matar a 12 personas y haber cometido al menos 45 violaciones en el estado de California entre los años 1970 y 1980.
Joseph James DeAngelo Jr., de 72 años y que vivía en el norte de la zona metropolitana de Sacramento, fue la persona acusada de ser el famoso criminal en serie conocido, pero hasta ahora no identificado, como el “Golden State Killer", "el Violador del Área del Este" o el "Acosador Nocturno Original".
En este caso, muestras de ADN también ayudaron a llegar al asesino que pasó casi tres décadas impune.
Comparte esta noticia