La orden promete desatar una batalla judicial contra los ecologistas y tribus nativas que se oponen a la explotación de esos terrenos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó reducir en un total de 2,28 millones de acres (9.234 kilómetros cuadrados) el territorio de dos extensas áreas naturales en el estado de Utah que habían protegido sus predecesores demócratas Barack Obama (2009-2017) y Bill Clinton (1993-2001).
La orden supone la mayor reducción de territorio de un monumento nacional estadounidense -un terreno natural protegido por el Gobierno federal- jamás registrada, y promete desatar una batalla judicial contra los ecologistas y tribus nativas que se oponen a la explotación de esos terrenos.
"He venido a Utah a adoptar una acción muy histórica: para revertir la extralimitación (del Gobierno) federal y restaurar los derechos de esta tierra a sus ciudadanos", dijo Trump en un discurso en el Capitolio estatal de Utah, en la ciudad de Salt Lake City.
La orden presidencial recorta 1,28 millones de acres (5.184 kilómetros cuadrados) al monumento Bears Ears, creado el año pasado por Obama y que tenía un tamaño inicial de 1,5 millones de acres (6.075 kilómetros cuadrados), con lo que se quedará en 220.000 acres (891 kilómetros cuadrados).
También reduce el monumento Grand Staircase-Escalante, creado por Clinton en 1996 y que pasará de tener 2 millones de acres protegidos (8.100 kilómetros cuadrados) a 1 millón (4.050 kilómetros cuadrados).
Las cifras las proporcionó a periodistas el secretario de Interior de EEUU, Ryan Zinke, quien aseguró que la decisión no tiene nada que ver con ningún interés de explotación minera, a pesar de que al menos Grand Staircase-Escalante tiene yacimientos de carbón.
El objetivo, según Zinke, es abrir el territorio que antes estaba protegido para facilitar el uso público de sus carreteras y pastos, además de a la "caza y pesca saludable". (EFE)
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