Marek Dunin-Wasowicz de ahora 93 años, rememoró ante un juzgado al norte de Alemania, la siniestra era de persecución, segregación racial y tortura contra los judíos.
Un superviviente del campo de concentración nazi de Stutthof (en la actual Polonia) declaró este lunes en el proceso contra Bruno Dey, un antiguo guarda de seguridad miembro de las SS, que las ejecuciones que tenían lugar en la cámara de gas eran un "secreto a voces" entre los reclusos.
Marek Dunin-Wasowicz, ahora de 93 años y que tenía 17 cuando llegó al campo en mayo de 1944, había sido detenido en Varsovia por la Gestapo junto con toda su familia, debido a su implicación en la resistencia contra los nazis.
"Cuando la gente de las SS recogía a reclusos en el trabajo o en los barracones, y nunca volvían a aparecer, estaba claro que habían sido asesinados", declaró el superviviente a través de una intérprete ante el Juzgado Regional de Hamburgo (norte de Alemania).
Rememoró tragedia
A pesar de haber presenciado numerosas ejecuciones, Dunin-Wasowicz nunca vio personalmente qué ocurría tras las puertas de la cámara de gas, pero rememoró que cuando los recién llegados preguntaban por el propósito del edificio, se les contestaba que "el camino a la libertad pasa por la chimenea".
En el curso de su testimonio, el superviviente rememoró los trabajos forzados y las "inhumanas, siniestras e increíbles" condiciones de vida a las que se vio sometido en Stutthof.
Permanece con vida gracias a que, hace 74 años, logró escapar por la noche de una de las marchas de la muerte organizadas por los nazis para escapar ante el avance del Ejército Rojo.
Con su declaración, Dunin-Wasowicz contradijo al acusado, también de 93 años, que, a pesar de haber reconocido que había oído gritos y golpes procedentes de la cámara de gas, en sesiones anteriores del juicio se había justificado diciendo que ignoraba lo que ocurría en ella.
Inculpado es acusado de masivo asesinato
El antiguo guarda contra el que se dirige la causa, identificado por la prensa alemana como Bruno D., explicó que tras ser reclutado por las SS había sido destinado a labores de vigilancia en el campo al ser declarado no apto para el frente debido a un problema cardíaco.
Juzgado por un tribunal de menores debido a que en el momento de los hechos sólo tenía 17 años, Dey está acusado de haber sido cómplice del asesinato "con crueldad y alevosía" de 5.230 reclusos, entre agosto de 1944 y abril de 1945.
Los historiadores calculan que en el campo de concentración de Stutthof, situado a 37 kilómetros de la ciudad polaca de Gdansk, fueron asesinadas unas 65.000 personas.
EFE
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