El emotivo concierto comenzó con un minuto de silencio en homenaje a las 90 personas asesinadas allí el año pasado.
Un año después de los atentados de París, la música volvió a sonar este sábado en el Bataclan, de la mano de Sting, en un emotivo concierto que comenzó con un minuto de silencio en homenaje a las 90 personas asesinadas allí el 13 de noviembre de 2015.
El concierto duró una hora y media y luego de la última canción, "The Empty Chair", interpretada por Sting, numerosos espectadores se abrazaron unos a otros y aplaudieron largamente celebrando tanto la presentación del cantante británico como el renacimiento de la sala parisina.
Fue con un minuto de silencio, emotivo, que Sting lanzó este concierto tan particular: "Esta noche, tenemos que conciliar dos deberes: primero recordar a quienes perdieron la vida en el ataque y también celebrar la vida, la música, en este lugar histórico", dijo el cantante en francés.
Antes de acceder, los espectadores (entre los que había varios centenares de los que habían estado allí mismo el día de los atentados o miembros de sus familias) tuvieron que pasar hasta cuatro controles de seguridad. De hecho, en el exterior del edificio, decenas de policías armados con metralletas habían establecido un perímetro que impedía acercarse a varias decenas de metros de la fachada a cualquiera que no tuviera una entrada.
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