El esqueleto de un adolescente de hace 3.000 años apunta a la siniestra leyenda que rodea a la montaña de "los lobos".
Arqueólogos informaron de un hallazgo siniestro en la cima de una montaña griega consagrada al antiguo dios Zeus, que podría corroborar una de las leyendas más trágicas.
Restos. Durante una excavación en el monte Lykaion, venerado como el lugar del nacimiento de Zeus, se encontró el esqueleto de un adolescente de hace 3.000 años, informó el ministerio de Cultura de Grecia. Los restos estaban entre las cenizas de animales sacrificados en honor al rey de los dioses griegos en la región sureña del Peloponeso. El hallazgo se remonta al siglo XI a.C.
Sacrificios humanos. Los excavadores dicen que es muy temprano para especular sobre la causa de la muerte del adolescente, pero el descubrimiento es notable porque el monte Lykaion fue vinculado durante siglos con los cultos griegos más perversos. Escritores antiguos hablaban de sacrificios humanos en el monte Lykaion, una práctica que los arqueólogos muy raras veces han podido confirmar.
Leyenda. De acuerdo con la leyenda, un niño era sacrificado con animales y toda la carne era cocinada junta para luego ser servida. Quien se comía la parte humana se convertiría en lobo durante nueve años. «Quien ha probado entrañas humanas mezcladas con las de otras víctimas, necesariamente se convierte en lobo», escribió Platón en la "República".

