La medida busca disuadir a los cazadores furtivos que matan a estos animales para llevarse sus cuernos.
El zoológico Dvur Kralove, ubicado en la ciudad de Dvůr Králové nad Labem (República Checa), ha empezado a cortar los cuernos de sus ejemplares de rinoceronte. La radical medida tendría como propósito la protección estos animales ante los cazadores que roban cuernos para venderlos en el mercado negro.
El local acoge a un grupo de 17 rinocerontes negros y cuatro rinocerontes blancos sobre los que se han utilizado motosierras para dejarlos sin sus grandes cornamentas. “Ha sido una decisión muy difícil, pero el riesgo de verlos muertos es muy alto y preferimos priorizar su seguridad”, dijo Premysl Rabas, director de la institución.
No es doloroso. Para la intervención preventiva, la institución checa somete a los animales a un potente sedante para que no despierten durante el proceso. Además se les tapa las orejas y los ojos con el fin de que las partículas óseas que salen disparadas por el corte no los afecten. Según se informó, esto no deja secuelas ni causa dolor a los rinocerontes.
Los cuernos de rinoceronte son traficados por un alto precio. Este oscila entre los 30 mil y 60 mil dólares. El pasado 7 de marzo, un rinoceronte del zoológico de Thoiry, en Francia, fue hallado muerto y sin su cuerno.
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