Hecho ocurrió en una concentración policial por las agresiones que sufren los agentes durante las manifestaciones contra la reforma laboral de Francois Hollande.
Las protestas iniciadas hace más de dos meses en Francia contra la reforma laboral del Gobierno de Francois Hollande subieron de tono esta semana, con nuevos disturbios durante una concentración policial por las agresiones que sufren los agentes durante las manifestaciones.
Denuncian clima de hostilidad. En las movilizaciones contra la flexibilización del mercado de trabajo se hizo habitual el eslogan "Todo el mundo odia a la policía". Para denunciar este clima de hostilidad, cientos de policías se concentraron este miércoles en unas sesenta ciudades convocado por Alliance, el principal sindicato del país.
Plaza de República. En París, la protesta tuvo lugar en la Plaza de República. A menos de medio kilómetro de este lugar, un coche de policía fue incendiado y sus dos ocupantes resultaron heridos leves. Al respecto, el automóvil fue pasto de las llamas cuando varias personas lanzaron botellas, proyectiles y artefactos incendiarios contra una patrulla, con lo que quedó de nuevo patente el clima de tensión que ha acompañado hasta ahora las protestas.
300 agentes heridos. El Ministerio francés del Interior, que no ha facilitado datos de heridos civiles, apunta que desde el inicio de las protestas contra la reforma laboral 300 agentes han resultado heridos y 1.300 personas han sido detenidas, de las cuales ya se ha condenado a 51. "No hay manifestación que no degenere en Nantes, París o Rennes", declaró el secretario general del sindicato policial UNSA-Police, Philippe Canton.
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