José Serrano llamó al ex contralor Carlos Polit, quien es acusado de beneficiarse de Odebrecht.
Este viernes el Congreso de Ecuador destituyó del cargo a su propio presidente, el oficialista José Serrano, tras una polémica por su presunta participación en una conspiración para remover al fiscal general, Carlos Baca.
El Parlamento unicameral también resolvió someter a juicio político a Baca, señalado por Serrano de supuestamente incumplir acuerdos para esconder actos de corrupción. El caso en que se vieron envueltos Serrano, que mantendrá no obstante la dignidad de diputado, y Baca ha sido tildado por legisladores de "espionaje político" y "corrupción".
Rechazo mayoritario
La Asamblea Nacional, con 137 curules, avaló ambas resoluciones con el voto de 103 de 106 diputados presentes en una sesión en la que comparecieron ambos señalados. Serrano y Baca dieron explicaciones sobre un audio, según el cual el parlamentario conspiraba para remover al fiscal en medio de indagaciones sobre escándalos de corrupción, como el de sobornos de la brasileña Odebrecht en el país.
Serrano, quien asumió la presidencia del Parlamento por ser el más votado en los comicios de hace un año, continuará siendo asambleísta de acuerdo a la moción presentada por el parlamentario opositor Henry Cucalón, mientras que Baca enfrentará un juicio político en el que podría ser destituido de la función de fiscal general.
Baca divulgó en rueda de prensa en febrero pasado una conversación telefónica entre Serrano y el excontralor general y prófugo de la justicia Carlos Pólit, en la que el ahora expresidente del Legislativo planteó que había que "bajarse" (remover del cargo) al fiscal por incumplir acuerdos que no han sido revelados pero que apuntarían a esconder indagaciones sobre presuntos casos de corrupción, de acuerdo con parlamentarios. (Con información de AFP)
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