Rodrigo Paz Pereira, del Partido Demócrata Cristiano, y Jorge 'Tuto' Quiroga, de la alianza Libre, competirán el 19 de octubre en la primera segunda vuelta presidencial en la historia de Bolivia, tras unas elecciones marcadas por la salida de la izquierda del poder después de dos décadas.
Las elecciones generales celebradas ayer en Bolivia han redefinido el panorama político del país. Según los datos preliminares del Tribunal Supremo Electoral (TSE), con el 95,4 % de las actas computadas hasta la mañana de este lunes, el senador Rodrigo Paz Pereira, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), lidera con el 32,14 % de los votos, seguido por el expresidente Jorge 'Tuto' Quiroga, de la alianza Libre, con el 26,81 %. Ambos candidatos se enfrentarán en una inédita segunda vuelta el 19 de octubre, marcando un hito en la democracia boliviana.
Por primera vez desde la aprobación de la Constitución de 2009, Bolivia celebrará una segunda vuelta presidencial, ya que ningún candidato alcanzó el 50 % de los votos válidos ni el 40 % con una ventaja de al menos diez puntos sobre el segundo lugar.
Esta contienda enfrentará a dos figuras con trayectorias distintas: Paz Pereira, un candidato de centro que sorprendió al superar las encuestas, y Quiroga, un exmandatario conservador con experiencia internacional.
El resultado electoral supone un cambio significativo, con la salida del Movimiento al Socialismo (MAS) del poder tras 20 años de gobiernos liderados por Evo Morales (2006-2019) y Luis Arce. El candidato del MAS, Eduardo del Castillo, obtuvo solo el 3,1 %, apenas suficiente para mantener la personalidad jurídica del partido.

Rodrigo Paz Pereira: el candidato sorpresa
Rodrigo Paz Pereira, de 57 años, se ha convertido en la gran revelación de estas elecciones. Hijo del expresidente Jaime Paz Zamora (1989-1993) y de la española Carmen Pereira, nació en Santiago de Compostela en 1967, durante el exilio de sus padres por los gobiernos militares en Bolivia.
Economista con estudios en relaciones internacionales, Paz Pereira cuenta con una amplia trayectoria en el sector público: fue diputado (2002-2009), alcalde de Tarija (2015-2020) y actualmente es senador por Comunidad Ciudadana.
A pesar de iniciar la campaña con apenas un 2 % de apoyo en las encuestas, Paz Pereira logró captar el voto de sectores desencantados del MAS y de la derecha tradicional. Su compañero de fórmula, Edmand Lara, un excapitán de Policía conocido por denunciar corrupción, ha sido clave para conectar con el electorado a través de las redes sociales.
Paz Pereira propone una “Agenda 50/50” que busca descentralizar el 50 % de los recursos del gobierno central hacia las regiones y universidades públicas, promoviendo un “capitalismo para todos” con créditos accesibles y eliminación de aranceles.
“Bolivia necesita estabilidad, necesita gobernabilidad, pero necesita acabar con el Estado tranca para que el Estado trabaje para nosotros y nosotros para el Estado”, afirmó.
El resultado electoral refleja una profunda crisis del MAS, agravada por el enfrentamiento entre Evo Morales y Luis Arce. Morales, inhabilitado para postularse por haber gobernado tres periodos, promovió el voto nulo, que alcanzó el 19,86 %. Esto, sumado a la baja votación del candidato oficialista Eduardo del Castillo, marcó la salida de la izquierda del poder por primera vez en 20 años.
Jorge 'Tuto' Quiroga: experiencia y discurso conservador
Jorge 'Tuto' Quiroga, de 65 años, representa la experiencia política y el conservadurismo liberal. Nacido en Cochabamba, es ingeniero industrial y administrador de empresas formado en Estados Unidos. Fue ministro de Finanzas a los 32 años bajo el gobierno de Jaime Paz Zamora y asumió la presidencia de Bolivia (2001-2002) tras la renuncia de Hugo Banzer por motivos de salud.
Quiroga, quien postuló sin éxito en 2005, 2014 y 2020, apuesta por un modelo de corte liberal que incluye acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para estabilizar la economía, reducir el tamaño del Estado y cerrar empresas estatales ineficientes.
“Una larga noche de dos décadas terminó”, declaró tras los resultados, refiriéndose a la derrota del MAS. Su compañero de fórmula, Juan Pablo Velasco, refuerza su imagen de tecnócrata modernizador.
Quiroga también destaca por su afición al montañismo, habiendo conquistado cumbres de más de 6,000 metros, una metáfora que ahora enfrenta en su desafío electoral para remontar la ventaja de Paz Pereira.
La debacle de la izquierda en Bolivia
El resultado electoral refleja una profunda crisis del MAS, agravada por el enfrentamiento entre Evo Morales y Luis Arce. Morales, inhabilitado para postularse por haber gobernado tres periodos, promovió el voto nulo, que alcanzó el 19,86 %. Esto, sumado a la baja votación del candidato oficialista Eduardo del Castillo, marcó la salida de la izquierda del poder por primera vez en 20 años.
Samuel Doria Medina, de la alianza Unidad, quedó en tercer lugar con el 19,9 % y anunció su apoyo a Paz Pereira para la segunda vuelta. Andrónico Rodríguez, de la alianza Popular, obtuvo el 8,2 %, consolidando la fragmentación del voto de izquierda.
Retos para la segunda vuelta
Ambos candidatos enfrentan el desafío de abordar la crisis económica boliviana, caracterizada por la escasez de dólares, combustibles y una inflación interanual cercana al 25 %. Paz Pereira apuesta por una descentralización y estímulos a la economía formal sin recurrir al FMI, mientras Quiroga propone reformas legislativas para atraer inversión extranjera y acuerdos de libre comercio.
La segunda vuelta también estará marcada por la polarización política y la necesidad de captar el voto centrista. La experiencia local de Paz Pereira y su discurso de renovación contrastan con la trayectoria internacional y el enfoque tecnócrata de Quiroga, dejando a los bolivianos ante una decisión que definirá el rumbo del país.