Los actuales pasaportes sanitarios de quienes tengan solo dos dosis de las vacunas contra la COVID-19 caducarán cuando se cumplan siete meses desde la administración de la segunda inoculación.
Los esfuerzos en Europa para alentar a la población a vacunarse, mediante la exigencia de certificados de vacunación, resultados negativos de tests o prueba de haber sufrido COVID-19, han creado una verdadera montaña de reglamentaciones diversas y poco habituales.
Varios miles de suecos se han implantado en los últimos años un chip bajo la piel para reemplazar llaves, tarjetas de visita, billetes de tren y en el caso de algunos, su certificado de vacunas.
En Francia, el pasaporte sanitario se convertirá, desde el inicio de 2022, en un "pasaporte de vacunación", que solo podrá activarse con una pauta de vacunación completa y no con un simple test negativo.
Alrededor de 110.000 pasaportes sanitarios falsos circularían en Francia, donde se han realizado arrestos que tienen como objetivo tanto los usuarios de estos pasaportes falsos como las redes de traficantes.
El estado más poblado de Brasil solicitó este miércoles al Ministerio de Salud que exija el llamado pasaporte sanitario para los viajeros que entren al país.
Las autoridades suecas anunciaron que, en caso de que la situación empeore de forma notable, están preparadas para adoptar más medidas contra la COVID-19.
En un acto celebrado en el palacio presidencial, el mandatario de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que la sociedad debe entender que "el virus será para siempre".
El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció que mayores de 65 años que quieran conservar pasaporte sanitario deberán haber recibido una dosis de refuerzo.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, es muy criticado por su gestión de la pandemia que se ha cobrado la vida de más de 590 000 brasileños. Él ha expresado que será el "último de los brasileños" en vacunarse.
El director general de la Organización Mundial de la Salud señaló que el certificado de vacunación se podría considerar en el futuro si la cobertura aumentara y se pudiera establecer un sistema uniforme, "pero cuando sea el momento oportuno".
Por novena semana consecutiva, se registran protestas en Francia para denunciar el pasaportesanitario y la obligación de que todos los profesionales de la salud estén vacunados.
Alain Robert, conocido como el "Spiderman francés", escaló sin cuerdas un rascacielos de 187 metros de altura, para protestar contra el pasaporte sanitario.
A pesar de las críticas al pasaporte sanitario, millones de personas dieron el paso hacia la vacunaciónpara evitar someterse a pruebas de diagnóstico cada tres días.
El ministro de Salud, Hernando Cevallos, señaló que esta 'tarjeta verde' acreditaría que un ciudadano cuenta con su esquema completo de vacunación o que no tiene COVID-19.
El ministro de Salud de Quebec dijo que el objetivo con el pasaporte sanitario es "no volver a un confinamiento generalizado y, al mismo tiempo, evitar saturar nuestros hospitales".
El especialista explicó que el ritmo de vacunación en Francia "se ha ido ralentizando día tras día", especialmente a medida que se abría la inoculación para los más jóvenes. En cambio, las personas de más edad mostraron un mayor compromiso con la inmunización.
El pasaporte sanitario es obligatorio para acceder a discotecas y a grandes eventos sociales o deportivos con más de 1 000 personas, pero ahora se exigirá en lugares culturales donde se reciba a más de 50 personas.