El arzobispo de Lima celebró una misa solemne por el Domingo de Ramos en la Basílica Catedral de Lima, dando inicio a las festividades por Semana Santa,.
El arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, celebró una solemne misa por Domingo de Ramos en la Basílica Catedral de Lima, dando inicio a las festividades por Semana Santa, en la que se proclama la Pasión del Señor.
Durante su homilía, que se transmitió por RPP Noticias, el sacerdote invocó al pueblo peruano a no ir por el camino de la violencia, del placer, de venderse por dinero o de buscar el poder atropellando a los demás.
Pidió ser un pueblo que Jesús contemple con alegría, en el que los adultos tienen la responsabilidad de guiar a los jóvenes, a quienes instó a no dormirse en el “sueño del placer”, sino en buscar a Dios en sus corazones.
“A la juventud, le digo, despierten de ese mal sueño, anímense a estudiar, a querer ser padres, a ser amigos de sus amigos, a mirar a Jesús que te busca y quiere acompañarte, a pedir perdón. A estar alegres. La vida no es este odio ni esta pelea en la que día tras día quieren ahogar la esperanza de la juventud”, manifestó.
Asimismo cuestionó la cobardía y la traición que se evidenció durante la agonía de Jesús en el calvario, representado por Pedro y Judas, respectivamente.
“Hay un abismo entre el traidor y el cobarde, el traidor no se arrepiente, se desespera, pero Pedro, cobarde, llora y se arrepiente”, expresó.
“Ese sueño que nos invade en el mundo de hoy, de que todo es problema de dinero, todo es problema de egoísmo: qué saco, qué me dan, cuánto quiero, me vendo y me compran. El sueño del odio no perdona, no hay derecho de ninguna manera, el odio del pecador, soberbio que no quiere perdonar porque él no quiere el perdón”, apuntó.
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