Cusco: Pisac o la hacienda real de Pachacutec

El complejo arqueológico de Pisac cuya construcción fue planificada por Pachacutec, según el arqueólogo Jhon Rowe, se encuentra ubicado en la provincia de Calca, región Cusco, a 3 mil 300 metros sobre el nivel del mar.

Pisac provendría de la palabra quechua Pisaqa o  “perdiz”. Su estructura se caracteriza por impresionantes andenerías agrícolas, torreones, caminos de articulación y un Intihuatana o  reloj solar, propio de la cultura inca. También presenta recintos ceremoniales, canales de conducción de agua para llevar este recurso hasta los andenes.

Triángulo equidistante

El investigador cusqueño Víctor Angles Vargas, afirma que la ubicación de este centro arqueológico forma, junto con el Cusco y Piquillacta, un triángulo equilátero en donde cada punto dista de 33 kilómetros de distancia entre si; los tres se encuentran ubicados a 3 mil 300 metros sobre el nivel del mar.  Esta localización habría sido planificada de manera geométrica para proteger la ciudad de los posibles ataques de los Antis, quienes eran sus enemigos.

Cuando uno visita Pisac se dará cuenta que la construcción presenta una muralla donde algunas de las piedras tienen dimensiones asombrosas. Reúne cinco puertas, de las cuales una tiene un dintel,  la misma que es conocida como el Amaru Punku o puerta de las serpientes. Asimismo se aprecian dos túneles, uno que va hacia el norte y tiene 16 metros de largo y el segundo se dirige a la cima, la misma que tiene una longitud de 3 metros.

En este complejo, según refieren los historiadores, antiguamente existían puentes colgantes; uno de ellos se hallaba en Pacchayoc y el otro aledaño al Intihuatana.  Para llegar a los depósitos o qolqas (que existen en número de seis) uno debe subir una escalinata con 102 peldaños. Los mismos se ubican a 200 metros del Intihuatana.

Andenes y cementerio inca

El conjunto de andenerías es lo más característico de este centro arqueológico, debido a que era una zona eminentemente agrícola. Pisac posee, en comparación con otras construcciones incas, 14 formas diferentes de andenes construidos desde los 2 mil 995 hasta los 3 mil 450 metros sobre el nivel del mar.

Al frente del complejo se ubica el cementerio inca, el mismo que está separado por el riachuelo Quitamayu, un lugar impresionante, enclavado en una cuesta de casi cien metros de altura, pertenece a la montaña Linliy. Este cementerio es conocido como Tankanamarka (tankay = para empujar, marka = lugar; puede traducirse como "lugar de lanzamiento"), y debe haber contenido aproximadamente 10 000 tumbas.

Se refiere que los incas creían en la reencarnación, por ello guardaban a sus momias con todas sus propiedades y alimentos necesarios (alforjas) para su nueva vida. Cuando los españoles se enteraron de esta costumbre, no dudaron en profanar las tumbas y saquear las joyas, metales y piedras preciosas. Hoy pueden observarse pequeños agujeros, producto de la profanación.

Pisac

En el complejo de Pisac, los turistas que la visiten también podrán apreciar 20 torres, construidas en los bordes salientes de la montaña, no se sabe aun para qué se habrían construido, pero se les relaciones a funciones hidráulicas.

El Intihuatana

Uno de los monumentos ceremoniales más importantes, sin duda, es el reloj solar o el Intihuatana, donde se puede apreciar muros tallados que se encierran en semicírculo.

Al centro del edificio se encuentra un altar tallado en piedra, conocido también como Intihuatana, que habría sido usado para observar los movimientos solares, y como altar para celebrar ceremonias religiosas: el culto al Dios Sol o sacrificios de animales. Asimismo, al oeste del altar se halla una piedra tallada que pudo servir para las observaciones astronómicas, esta representaba las tres fases andinas del mundo religioso: el cielo, el mundo terrenal y el subsuelo.

El altar tiene la forma de una letra D, y está perfectamente orientada con la salida del sol, en el solsticio de junio. Sólo en Machu Picchu, se puede ver una roca parecida.

Lea más noticias de la región Cusco