La Independencia quedó aprobada con la firma de más de 3 mil personas, ciudadanos de Lima, quienes dejaron registro del acto.
Poco después de la llegada del Generalísimo Don José de San Martín a las costas peruanas en 1820, desde donde se empezaba a gestar la Independencia del Perú, los esfuerzos de los ciudadanos y de las autoridades afines a la causa independentista empezaron a hacer su trabajo sin importar que, en aquel entonces, el Perú aún era dominado por la corona española.
El Virreinato tambalea. El año siguiente al arribo de San Martín, el Virreinato estaba debilitado. El 29 de enero se produce el denominado Motín de Aznapuquio donde el virrey Pezuela es depuesto y en su lugar asume La Serna. En ese contexto y meses después de tensión, el 4 de junio de 1821, La Serna y San Martín tienen una reunión en la hacienda Punchauca (actual distrito de Carabayllo, Lima) para negociar el proceso de independencia, sin embargo, la reunión no tuvo éxito y el Ejército del libertador decidió cercar la ciudad conforme pasaban los días.
Escenario listo. El virrey La Serna encarga la ciudad de Lima a José de la Mar quien se parapeta en el Callao, en la fortaleza del Real Felipe. El Ejército Realista con Canterac a la cabeza parte hacia la sierra y el General San Martín ordena sagazmente al general Álvarez de Arenales a repeler el avance mientras el ganaba terreno en Lima. El caos por la escasez de alimentos y la posibilidad de pillaje era inminente, entonces el pueblo pidió al libertador que ingresase con sus hombres. San Martín pidió a cambio que se produjera un cabildo abierto para aprobar y jurar la independencia.
Ingreso de San Martín a Lima. Así fue. El 12 de julio de 1821, San Martín ingresó a la ciudad y se reunió con los representantes del Ayuntamiento para redactar un acta en la que quedara constancia el acto de la independencia. Dos días después, y mientras todas las tropas del Ejército Libertador terminaban de ingresar a la ciudad, se remitió una carta al Ayuntamiento para iniciar el proceso mediante cabildo. El apoyo es total, no solo de las autoridades municipales sino de la población en general, por ello, al día siguiente, el 15 de julio, responden favorablemente y se realiza el registro de firmas donde se convoca a los vecinos que tengan una conducta proba y afín a la causa.
Acta de Independencia y Cabildo Abierto. El Ayuntamiento aprobó que el libro permanezca abierto y accesible a los vecinos. En la primera hoja suscriben 60 personalidades y en total fueron 339 los hombres ilustres quienes rubricaron a favor de la libertad. Entre ellos Isidro de Cortázar y Abarca, Conde de San Isidro que ejercía como alcalde de Lima; Bartolomé de las Heras, Arzobispo de Lima; Toribio Rodríguez de Mendoza, Francisco Xavier de Luna Pizarro, José de la Riva Agüero y Sánchez Boquete, entre otros ilustres hombres. En las siguientes hojas y durante los siguientes días firmaron alrededor de 3 mil personas, así todo quedó expedito para proclamar la independencia.
Contenido del Acta. En un pequeño párrafo previo a las firmas, se puede leer la fecha y las personalidades que suscriben además de la voluntad de San Martín para que los ciudadanos firmen el Acta. "...he impuesto de su contenido reducido a que las personas de conocida probidad, luces y patriotismo que habita en esta capital expresen si la opinión general se halla decidida por la Independencia, cuyo voto le sirviese de norte al expresado sr General para proceder a la jura de ella", y culmina: "Todos los sres concurrentes y satisfechos de la opinión de los habitantes de la capital dijeron, que la voluntad general está decidida por la independencia del Perú de la dominación Española y de cualquiera otra extranjera".
Proclamación de la Independencia. San Martín fijó la fecha de la proclamación de la Independencia para el 28 de julio de 1821. Aquel día se hizo el acto en cuatro plazas diferentes y el día 29 de julio se hizo la jura. El documento permanece en los Archivos Históricos de Lima guardado con micas en cada hoja. Fue redactado con tinta ferrogálica, por lo que el deterioro con el paso de los años es notorio. Los primeros años muchas personas buscaban sus nombres o de familiares en el acta y manipulaban sin cuidado, la tinta se fue corriendo y por eso ahora solo se puede observar y tocar con guantes especiales.
Restauración del Acta. En los años 80, el acta original fue hasta el Vaticano para que pase por un proceso de restauración, luego, se elaboró una réplica que está abierta al público en la Municipalidad de Lima. Esta es la partida de nacimiento del Perú como país independiente, que aún mantiene su esencia viva a 195 años de su primer registro.
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