El lanzamiento del nuevo satélite estaba previsto para las 13.26 hora local a bordo de un cohete Ariane-5.
El lanzamiento del satélite "espía" militar Helios 2B, previsto para hoy en el centro espacial de Kurú, en la Guayana francesa, fue aplazado por problemas técnicos detectados en una válvula de combustible de la lanzadera.
El lanzamiento y puesta en órbita de este satélite de observación militar se producirá "en unos días", según dijo a Efe el presidente del consorcio espacial europeo Arianespace, Jean-Yves Le Gall.
La suspensión de la misión se debe al hallazgo de "una pieza defectuosa" en la lanzadera que deberá ser reemplazada, según Le Gall, quien precisó que se trata de una válvula o compuerta de paso de carburante a la zona central de propulsión.
Le Gall compareció ante la prensa para informar de que, por el momento, no se puede decir cuándo estará reparada la pieza dañada y para incidir en que la decisión de suspender el lanzamiento responde a la política prioritaria de todos los países miembros de este programa, entre ellos España, de no asumir riesgos y "garantizar una misión exitosa".
El lanzamiento del nuevo satélite estaba previsto para las 13.26 hora local (16.26 GMT) a bordo de un cohete Ariane-5.
Una vez puesto en órbita, el Helios 2B podrá observar cualquier punto de la Tierra sincronizada con el Sol para garantizar la misma iluminación en las fotografías tomadas sobre un mismo lugar y evitar así la posible distorsión de imágenes.
Las fuerzas armadas podrán utilizar luego esas imágenes para preparar misiones y estudiar posibles amenazas, así como para elaborar mapas de zonas poco conocidas, especialmente de países en conflicto, o para gestionar catástrofes meteorológicas.
El primer Helios, el 1A fue lanzado en 1995 y todavía sigue operativo, mientras que el Helios 1B, puesto en órbita en 1999, terminó su vida activa en 2004.
Ese mismo año, se lanzó el primer satélite de la nueva generación, el Helios 2A, "gemelo" del que debía lanzarse hoy.
A diferencia de sus predecesores de la familia 1, los Helios 2 incorporan infrarrojos y sensores ópticos de mayor definición, con los que pueden operar en todo tipo de condiciones y captar detalles y objetos de tamaño muy pequeño.
Con una masa al despegue de 4.200 kilogramos, el Helios 2B fue construido por EADS Astrium, aunque los instrumentos ópticos del satélite fueron desarrollados por Thales Alenia Space.
El programa cuenta con la participación de Bélgica, Italia, Grecia y España, países todos ellos "copropietarios" al 2,5 por ciento frente al 90% correspondiente a Francia, y con la colaboración de Alemania, en calidad de miembro asociado.
Muchas de las instantáneas que toma el satélite se envían a todos los socios y otras son de interés específico para cada uno de ellos que, cuentan con sus propias claves para acceder a ellas.
Como ejemplo, el responsable del programa por parte del Estado Mayor del Ejército francés, el general Christophe Morand, explicó que las imágenes captadas por este tipo de satélites sirven para probar que un país ha violado la frontera o la soberanía de otro, o para comprobar la existencia de sitios o plantas sospechosas, como las de proliferación nuclear.
"Podemos usar esas imágenes para reconstruir un modelo de terreno, visualizar un itinerario, identificar puntos de peligro" y "precisar objetivos" de eventuales misiones militares, añadió.
Pascal Fintz, director del programa Helios de la Dirección General de Armamento (DGA) de Francia, la entidad responsable del mismo, subrayó que el sistema es "un éxito total de la política espacial de defensa y seguridad de Francia y de la Unión Europea (UE)".
La DGA "trabaja ya en la sucesión, en el programa Musis, que garantizará la continuidad" de esa cooperación y también, según Fintz, el respeto del principio de "mutua independencia". EFE
El lanzamiento y puesta en órbita de este satélite de observación militar se producirá "en unos días", según dijo a Efe el presidente del consorcio espacial europeo Arianespace, Jean-Yves Le Gall.
La suspensión de la misión se debe al hallazgo de "una pieza defectuosa" en la lanzadera que deberá ser reemplazada, según Le Gall, quien precisó que se trata de una válvula o compuerta de paso de carburante a la zona central de propulsión.
Le Gall compareció ante la prensa para informar de que, por el momento, no se puede decir cuándo estará reparada la pieza dañada y para incidir en que la decisión de suspender el lanzamiento responde a la política prioritaria de todos los países miembros de este programa, entre ellos España, de no asumir riesgos y "garantizar una misión exitosa".
El lanzamiento del nuevo satélite estaba previsto para las 13.26 hora local (16.26 GMT) a bordo de un cohete Ariane-5.
Una vez puesto en órbita, el Helios 2B podrá observar cualquier punto de la Tierra sincronizada con el Sol para garantizar la misma iluminación en las fotografías tomadas sobre un mismo lugar y evitar así la posible distorsión de imágenes.
Las fuerzas armadas podrán utilizar luego esas imágenes para preparar misiones y estudiar posibles amenazas, así como para elaborar mapas de zonas poco conocidas, especialmente de países en conflicto, o para gestionar catástrofes meteorológicas.
El primer Helios, el 1A fue lanzado en 1995 y todavía sigue operativo, mientras que el Helios 1B, puesto en órbita en 1999, terminó su vida activa en 2004.
Ese mismo año, se lanzó el primer satélite de la nueva generación, el Helios 2A, "gemelo" del que debía lanzarse hoy.
A diferencia de sus predecesores de la familia 1, los Helios 2 incorporan infrarrojos y sensores ópticos de mayor definición, con los que pueden operar en todo tipo de condiciones y captar detalles y objetos de tamaño muy pequeño.
Con una masa al despegue de 4.200 kilogramos, el Helios 2B fue construido por EADS Astrium, aunque los instrumentos ópticos del satélite fueron desarrollados por Thales Alenia Space.
El programa cuenta con la participación de Bélgica, Italia, Grecia y España, países todos ellos "copropietarios" al 2,5 por ciento frente al 90% correspondiente a Francia, y con la colaboración de Alemania, en calidad de miembro asociado.
Muchas de las instantáneas que toma el satélite se envían a todos los socios y otras son de interés específico para cada uno de ellos que, cuentan con sus propias claves para acceder a ellas.
Como ejemplo, el responsable del programa por parte del Estado Mayor del Ejército francés, el general Christophe Morand, explicó que las imágenes captadas por este tipo de satélites sirven para probar que un país ha violado la frontera o la soberanía de otro, o para comprobar la existencia de sitios o plantas sospechosas, como las de proliferación nuclear.
"Podemos usar esas imágenes para reconstruir un modelo de terreno, visualizar un itinerario, identificar puntos de peligro" y "precisar objetivos" de eventuales misiones militares, añadió.
Pascal Fintz, director del programa Helios de la Dirección General de Armamento (DGA) de Francia, la entidad responsable del mismo, subrayó que el sistema es "un éxito total de la política espacial de defensa y seguridad de Francia y de la Unión Europea (UE)".
La DGA "trabaja ya en la sucesión, en el programa Musis, que garantizará la continuidad" de esa cooperación y también, según Fintz, el respeto del principio de "mutua independencia". EFE
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