La empresa reconoció que los automóviles que recorren países del mundo capturaban informaciones personales enviados por redes inalámbricas no protegidas.
El gigante informático Google afronta hoy críticas de todo el mundo tras admitir que había recopilado datos personales sin permiso de sus dueños desde 2007 mientras creaba su archivo de fotos de calles StreetView.
La empresa reconoció el viernes en su blog oficial que los automóviles que recorren países de todo el mundo para hacer las fotos de calles para el programa "StreetView" también capturaban correos electrónicos y otras informaciones personales enviados por redes inalámbricas no protegidas por una contraseña.
Anteriormente Google, que opera el mayor buscador de información de internet, había negado haber recogido ese tipo de datos.
Alan Eustace, vicepresidente de la empresa, atribuyó su recopilación a un "error". Afirmó que la compañía nunca tuvo intención de usarlos y que los destruirá "lo antes posible" en coordinación con las agencias reguladoras en los respectivos países.
Pero eso no detuvo el alud de críticas que hoy cayó sobre la compañía, empezando en Alemania, cuyas autoridades forzaron a la empresa a revisar los datos que recogían sus automóviles.
La ministra encargada de protección al consumidor de ese país, Ilse Aigner, dijo hoy en un comunicado que "parece que Google ha entrado ilegalmente en las redes privadas en violación de la ley alemana".
A su juicio, esta revelación "es alarmante y una prueba adicional de que la ley de protección a la privacidad es un concepto del que Google hace caso omiso".
En Estados Unidos, el Centro de Información sobre Privacidad Electrónica, una organización sin fin de lucro, acusó a Google de violar "la confianza de los consumidores" y recalcó que es difícil creerse que compiló la información "accidentalmente".
Privacy Internacional, una coalición de organizaciones en pro de la privacidad de todo el mundo, señaló que Google debe adoptar una nueva actitud respecto a los datos personales de los internautas.
"El público hará bien en tratar las declaraciones de Google con escepticismo hasta que la compañía reforme sus políticas y sea más responsable", señaló en un comunicado la coalición, con sede en Londres.
Del mismo modo, la Asociación Fronteras Electrónicas y la Fundación de Privacidad de Australia se han quejado de la recopilación de datos de las redes WiFi por parte de los vehículos de Google en ese país.
La empresa explicó en el blog que uno de sus expertos creó un código en el 2006 para capturar datos personales de redes inalámbricas, el cual fue incorporado a los automóviles que salieron desde el año siguiente a hacer fotos de las calles de Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania, entre otros países.
Google ha anunciado que desde ahora sus vehículos no recogerán ningún tipo de información sobre las redes WiFi con las que entran en contacto.
-EFE-
La empresa reconoció el viernes en su blog oficial que los automóviles que recorren países de todo el mundo para hacer las fotos de calles para el programa "StreetView" también capturaban correos electrónicos y otras informaciones personales enviados por redes inalámbricas no protegidas por una contraseña.
Anteriormente Google, que opera el mayor buscador de información de internet, había negado haber recogido ese tipo de datos.
Alan Eustace, vicepresidente de la empresa, atribuyó su recopilación a un "error". Afirmó que la compañía nunca tuvo intención de usarlos y que los destruirá "lo antes posible" en coordinación con las agencias reguladoras en los respectivos países.
Pero eso no detuvo el alud de críticas que hoy cayó sobre la compañía, empezando en Alemania, cuyas autoridades forzaron a la empresa a revisar los datos que recogían sus automóviles.
La ministra encargada de protección al consumidor de ese país, Ilse Aigner, dijo hoy en un comunicado que "parece que Google ha entrado ilegalmente en las redes privadas en violación de la ley alemana".
A su juicio, esta revelación "es alarmante y una prueba adicional de que la ley de protección a la privacidad es un concepto del que Google hace caso omiso".
En Estados Unidos, el Centro de Información sobre Privacidad Electrónica, una organización sin fin de lucro, acusó a Google de violar "la confianza de los consumidores" y recalcó que es difícil creerse que compiló la información "accidentalmente".
Privacy Internacional, una coalición de organizaciones en pro de la privacidad de todo el mundo, señaló que Google debe adoptar una nueva actitud respecto a los datos personales de los internautas.
"El público hará bien en tratar las declaraciones de Google con escepticismo hasta que la compañía reforme sus políticas y sea más responsable", señaló en un comunicado la coalición, con sede en Londres.
Del mismo modo, la Asociación Fronteras Electrónicas y la Fundación de Privacidad de Australia se han quejado de la recopilación de datos de las redes WiFi por parte de los vehículos de Google en ese país.
La empresa explicó en el blog que uno de sus expertos creó un código en el 2006 para capturar datos personales de redes inalámbricas, el cual fue incorporado a los automóviles que salieron desde el año siguiente a hacer fotos de las calles de Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania, entre otros países.
Google ha anunciado que desde ahora sus vehículos no recogerán ningún tipo de información sobre las redes WiFi con las que entran en contacto.
-EFE-
Comparte esta noticia