Durante miles de años, el acropora era el coral predominante en el Caribe, pero más de tres décadas de la enfermedad de banda blanca, conocida como WBD, han destruido su capacidad para sobrevivir.
Científicos de Estados Unidos redoblan esfuerzos para determinar la causa de una enfermedad que ha ocasionado la desaparición de más del 90 por ciento del coral que forma el arrecife que protege el hábitat marino y suministra una barrera natural contra los huracanes en el Caribe.
Durante miles de años, el acropora era el coral predominante en el Caribe, pero más de tres décadas de la enfermedad de banda blanca, conocida como WBD, han destruido su capacidad para sobrevivir, según un informe divulgado hoy por la Universidad de Florida (UF).
Esa situación ha forzado a la vida marina a salir de esos hábitats y quedar expuesta a los ataques de los depredadores.
"Cuando esas estructuras desaparecen, algunas especies de peces no tienen adonde ir y toda la comunidad marina comienza a colapsar", dijo Jennifer Lentz, de la Universidad de Luisiana y autora principal del informe.
Para hallar el origen de la enfermedad, investigadores utilizan como herramientas el Sistema de Información Geográfica (SIG) y un programa que analiza enfermedades en seres humanos.
"Esas técnicas han sido relativamente poco usadas en la investigación sobre el coral. Con esos métodos, obtendremos un mejor entendimiento de la distribución de la enfermedad en el arrecife", dijo el profesor de geografía de la UF Jason Blackburn, coautor del informe.
Los microbiólogos y toxicólogos con frecuencia efectúan pruebas de laboratorio en muestras pequeñas simples de acropora para determinar los factores que contribuyen a la aparición de la WBD en el Caribe.
Esa enfermedad es identificada como un banda blanca que se mueve desde la base del coral hacia arriba, matando su piel y dejando el esqueleto expuesto, según el informe que fue publicado este mes en la revista PloS One.
Algunos científicos sugieren que la WBD no es ocasionada por un agente externo como una bacteria, sino que es una respuesta de estrés del coral en reacción a los cambios en el ambiente marino como la contaminación del océano y un aumento de la temperatura del agua debido al cambio climático.
Blackburn dijo que el origen aún no está claro y la meta del estudio fue utilizar el SIG y otros métodos para investigar los patrones de un brote de WBD que podría apuntar a un medio de transmisión o causa.
Hallaron que una muestra simple en la que las colonias de acropora son contadas y revisadas de forma aislada puede mostrar un escenario muy diferente de la enfermedad al obtenido cuando sólo "se efectúa un análisis de mapa" sobre la presencia o ausencia de WBD.
Los investigadores usaron información obtenida en 2004 por científicos en el Buck Island National Monument, en las islas Vírgenes de Estados Unidos, quienes analizaron no sólo el coral afectado, sino los sanos.
Los científicos de las universidades utilizaron esos datos en un programa, diseñado por la Universidad de Iowa inicialmente para el estudio del síndrome de la muerte súbita infantil, para crear mapas de WBD y ubicar las áreas con significativa concentración de la enfermedad.
FE
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