Los incendios están dejando una marca profunda en la economía de la ciudad, afectando la salud, el empleo y el costo de la vida. El impacto será duradero y afectará a millones de personas.
Los incendios que siguen azotando Los Ángeles son una de las catástrofes naturales más costosas de la historia reciente de Estados Unidos. Si bien la destrucción de viviendas es evidente, las consecuencias de estos incendios afectarán a la ciudad por años, impactando desde la salud de sus residentes hasta la economía local.
Los daños económicos ya son evidentes, con estimaciones que superan los U$D 250 000 millones. A medida que las llamas avanzan por áreas metropolitanas densamente pobladas, se alzan nuevas preguntas sobre cómo el impacto de estos incendios podría superar a otros desastres naturales. Según expertos, la situación se asemeja más a la devastación causada por un huracán o inundación que a un incendio forestal tradicional.
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1. Impacto en las viviendas y los negocios
La devastación en Los Ángeles ha arrasado con más de 12 000 viviendas, y se espera que esta cifra siga creciendo. Sin embargo, los costos no solo provienen de la pérdida de propiedades residenciales. El valor de las viviendas en zonas afectadas como Pacific Palisades y Altadena, con precios promedio de U$D 3.4 millones y U$D 1.3 millones respectivamente, ha disparado las estimaciones de pérdidas aseguradas. Aunque las aseguradoras han estimado pérdidas de hasta U$D 30 000 millones, no todos los propietarios recibirán la compensación completa, ya que muchos han visto sus pólizas canceladas.
En el ámbito comercial, los incendios también han destruido numerosos negocios, aunque algunas áreas comerciales han podido protegerse mediante medidas privadas. La falta de infraestructura y las zonas de trabajo afectadas también contribuyen a un costo económico más amplio, uno que será difícil de abordar incluso con una ayuda estatal.
2. Efectos sobre el empleo y la productividad
El impacto de los incendios no se limita a la propiedad. La pérdida temporal de empleos también es significativa. Con un descenso del 57% en las horas trabajadas en zonas afectadas como Malibú, la economía local se ve afectada en múltiples frentes. Se prevé la pérdida de entre 15 000 y 25 000 empleos, y aunque Los Ángeles tiene una base industrial diversa, la vulnerabilidad del sector de ocio y hospitalidad es una preocupación importante.
El empleo no es el único aspecto afectado. La creación de nuevos puestos de trabajo en los condados afectados también disminuirá significativamente, lo que podría prolongar los efectos negativos en la economía local. Para mitigar estos efectos, una declaración de desastre federal podría inyectar recursos, pero eso a su vez incrementaría la carga fiscal de la nación.
3. Consecuencias para la salud pública
Aunque las muertes directas ya han alcanzado los 25, los efectos sobre la salud de los residentes de Los Ángeles serán aún más duraderos. El humo de los incendios tiene efectos devastadores a largo plazo, aumentando la incidencia de enfermedades respiratorias, como el asma, y problemas más graves como el cáncer. Los niños y personas con afecciones respiratorias son especialmente vulnerables.
El impacto sobre la salud mental y el estrés económico también tendrá repercusiones durante años, exacerbando problemas preexistentes y dificultando la recuperación total de la población. Este ciclo de enfermedades y dificultades económicas podría prolongarse durante décadas, según estudios de salud pública.
4. Aumento del costo de vida y la vivienda
El impacto de los incendios en el costo de vida será inmediato. Los desplazados por los incendios enfrentan dificultades para encontrar vivienda, lo que probablemente incrementará los precios de alquiler en la ciudad. Además, el mercado de seguros de propiedad se encuentra en crisis, con precios de pólizas que se han vuelto inaccesibles en muchas zonas. Este aumento de los costos afecta a las familias, cuyas propiedades pierden valor y disminuye su patrimonio.
La escasez de viviendas asequibles en la ciudad podría llevar a las autoridades a reconsiderar la planificación urbana y las políticas de reconstrucción. Los expertos sugieren que, para mitigar el riesgo, se deben tomar medidas preventivas más estrictas en la construcción de viviendas y comunidades, lo que representa un costo adicional para los propietarios.
Posibles soluciones y caminos a seguir
La respuesta de los responsables políticos será fundamental para definir el futuro económico de Los Ángeles. Con una intervención adecuada, se podría evitar que los terrenos quemados se conviertan en una oportunidad para empresas de capital privado que busquen reconstruir en áreas más exclusivas. Por otro lado, una estrategia más inclusiva podría enfocarse en la creación de viviendas multifamiliares para mejorar la accesibilidad y mitigar la crisis de vivienda que está afectando a muchos.
Los próximos años serán cruciales para definir si Los Ángeles logra superar este desafío sin profundizar aún más en la desigualdad y la crisis económica que ya está enfrentando.
Créditos vídeo: YouTube | @BBCMundo.
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