La ecuación es más compleja de lo que parece y está trayendo más de un dolor de cabeza a los internautas que intentan resolverla.
Manzanas, plátanos y cocos son las frutas que forman parte de un problema matemático que ha llamado la atención en Facebook y otras redes sociales. Lo que en apariencia parece ser una ecuación para niños, resulta ser en verdad un complejo ejercicio de álgebra que ha puesto a pensar a miles de internautas. Pero, ¿por qué es tan complejo este ejercicio matemático? Aquí va la explicación.
Dulce problema
En la primera ilustración se ven tres manzanas que sumadas dan 30. Eso significa que cada manzana tiene un valor de 10. En la segunda aparece otra manzana sumada a dos racimos de plátanos que da un resultado final de 18. Si la manzana tenía un valor de 10, y el resultado de la operación es 18, se entiende que cada racimo de plátanos vale 4.
La tercera operación es una resta entre un racimo de plátanos y un coco partido por la mitad. El resultado es 2, por lo que se deduce que el coco tiene un valor de 2, ya que el racimo de plátanos vale 4. Hasta aquí todo parece muy claro.
Con todos los valores resueltos, solo hay que seguir los pasos del último problema para descubrir que el resultado es –aparentemente- 16 (2 + 10 + 4). Desafortunadamente, parece que no es así y esto básicamente por un detalle en los dibujos.
La semilla del asunto
En la segunda ecuación, habíamos deducido que el racimo de plátanos valía 4. Y en la tercera, que el coco tenía un valor de dos. El problema radica en que en la última ecuación el racimo de plátanos tiene tres unidades, en lugar de las cuatro anteriores. Asimismo, en la última imagen aparece solo medio coco en lugar de uno entero, modificando así su valor inicial.
Por ello, se han empezado a generalizar decenas de posibles respuestas por Facebook entre las que destacan las que afirman que la respuesta podría ir desde 12, hasta 15. Todo ello, atendiendo al porcentaje de alimento que han decidido quitar.
“Se puede interpretar de muchas maneras; una única forma no es más correcta que otra”, explica el doctor Kevin Bowman, de la Universidad Central de Lancashire, en el Daily Mail. “Uno puede imaginar, por ejemplo, que las dos piezas de coco de la tercera ecuación son de diferentes tamaños y, por lo tanto, añadir terceras o cuartas partes. En este sentido, hay una cantidad infinita de posibles respuestas”, añadió. Mientras tanto, nadie da una respuesta final al problema.
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