El sacerdote se propone acercar a los jóvenes a Dios por lo que también usa las redes sociales y ofrece servicio religioso vía Internet.
El sacerdote Sebastián Splawinski llegó a la parroquia de Avellaneda hace dos años y medio con un solo objetivo: llevar la Palabra de Dios a los jóvenes así tuviera que usar otras vías que no fueran las tradicionales.
Splawinski no viste sotana, bastan unos jeans y unas zapatillas para que organice misas en boliches o centros nocturnos en Avellaneda. Esos servicios religiosos, incluyen luces, láser, humo y bolas de espejos igual que una discoteca solo que se cantan letras religiosas, según informó el diario La Nación.
El sacerdote también utilizó las redes sociales como Facebook, donde supera los 25 mil seguidores, así como Internet para ofrecer misas online. “Veía que la forma tradicional no respondía a las necesidades e inquietudes de los pibes, que había perdido ese espíritu de fiesta. Yo sentía la necesidad de llegar a los jóvenes y no podía quedarme con los brazos cruzados esperando que ellos se acercaran. Fui a buscarlos”, aseguró el excéntrico cura.
“Comenzamos en el patio de la parroquia, con 200 personas. Luego, lo trasladamos al colegio que está al lado de la iglesia, y la próxima, que será el domingo 28, será en el club de fútbol, ya que no tenemos espacio suficiente para todos los que van a venir”, finalizó.
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