Para salir del círculo de la violencia es importante la red social (familiares y amigos), así como acciones a nivel de Estado y sociedad. Expertos nos explican.
Una mujer en Tarapoto murió calcinada, mientras que otra fue atacada con tijeras por su expareja. En lo que va del 2017, se han registrado 29 feminicidios y 58 tentativas en el Perú, según cifras del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP). Pese a esta cruda realidad, muy pocas víctimas denuncian a su agresor, ¿por qué? ¿Qué hacer?
Una mujer maltratada, sea física o psicológicamente, tiene baja autoestima, es insegura, dependiente, con sentimiento de culpa, niega su situación y justifica la conducta su agresor. Se convierte en una potencial víctima de feminicidio.
“Las agredidas, en su gran mayoría, no denuncian la violencia y menos acuden a los hospitales. Ellas ocultan al agresor, incluso los justifican. La violencia hacia la mujer se está incrementando”, señala Beatrice Macciotta, psiquiatra del Departamento de Salud Mental del Hospital Edgardo Rebagliati de EsSalud.
¿Qué podemos hacer para que una mujer violentada denuncie?
Liliana Tuñoque, psicóloga de la Clínica Internacional, resalta la importancia de ganarnos la confianza de la víctima y ser su soporte. "Podemos llegar a ella con frases tales como “no estás sola”, “te entiendo”, “te voy a ayudar”. Es muy importante la red social, es decir, la familia y los amigos más cercanos”.
Según la especialista, un agresor crea una dependencia emocional sobre ella, atacando su autoestima y haciéndola sentir incapaz, para tener poder sobre ella. “Ella siente que necesita a su pareja 'así me pegue, me maltrate, me humille, porque yo sola no soy capaz de hacer nada'. Es un mecanismo que utiliza la persona que maltrata a la mujer”.
Por su parte, Humberto Castillo, exdirector del Instituto Nacional de Salud Mental, aconseja que si una persona se da cuenta que tiende a ser muy dependiente del otro; debe hacer un alto y revisar sus emociones. Está recibiendo una falsa señal para acercarse a personas que no son buenas.
"Deben estar atentos ante señales como sentimientos de culpa, arrepentimiento, sentimientos de no tolerar la soledad, angustia de abandono, sentimiento de ser dominado y cólera en la pareja. Y deben buscar ayuda profesional", señala el médico psiquiatra.
Control y poder
Muchos nos preguntamos por qué algunas mujeres no escapan de la violencia abusiva, pero no reparamos en que no todo está en sus manos, según lo hace notar Cristina Alcalde, antropóloga y profesora de la Universidad de Kentucky (Estados Unidos).
"Hay que tomar en cuenta qué recursos existen y qué podemos hacer para facilitar que ellas no estén en estas situaciones. A largo plazo lo más importante es desconectar la violencia de la masculinidad. Se necesitan políticas públicas, leyes, la comunicación con los padres y madres. Es importante el diálogo para cambiar las ideas".
Con frecuencia, la sociedad es cómplice y hasta ciega, hay un doble discurso. En opinión de Alcalde, el diálogo, la capacitación y la sensibilización sobre violencia de género deben ser a todo nivel. "Violación, incesto, feminicidio y violencia homofóbica, porque si nos enfocamos en un solo tipo de violencia, las demás siguen".
¿Cómo evitar criar futuros agresores o víctimas?
En muchos casos la violencia contra la mujer se da en presencia de los hijos, y en vista de que el maltrato se aprende, es importante reaccionar a tiempo. La psicóloga Liliana Tuñoque recalca que no se debe sobreproteger a los hijos y además nos aconseja: “si ha ocurrido una situación de violencia, conversar con ellos y dejar muy en claro que esa conducta no es la más adecuada, llevarlos a un especialista y en caso de que no haya esa posibilidad, permitir que nuestros hijos a través de sus dibujos y juegos (herramienta terapéutica) puedan canalizar eso que están viviendo”.
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