Ellos quieren acelerar los trabajos para que sus hijos vuelvan a clases lo antes posible.
Padres de familia colaboran en las labores de limpieza del colegio El Álamo, en Comas, uno de los 178 centros educativos afectados por el gran incendio que la semana pasada consumió un almacén de llantas en San Martín de Porres.
Los padres se turnan para limpiar las aulas y patios del colegio, afectados por las cenizas de caucho que cayeron durante el incendio. Sin embargo, el trabajo se dificulta debido a que hay mallas en los techos donde se ha acumulado el hollín y este se levanta con el viento, ensuciando nuevamente el recinto.
“Hay dos mallas en el techo y eso se nos escapa. Quisiéramos apoyo, porque cae el hollín a los patios”, dijo a RPP Noticias una madre de familia, representante de la APAFA del mentado colegio.
Los padres esperan que las clases se reinicien lo antes posible, y que se reprogramen las horas perdidas por este problema. “Vamos varios días sin clases, queremos empezar de una vez”, comentó la señora.
Solo en este colegio 485 alumnos no pueden reanudar sus clases debido a la presencia de residuos tóxicos.
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