No se pueden evitar los conflictos en la escuela, pero es mejor preparar a nuestros hijos para que los enfrenten de forma adecuada.
“El conflicto en sí no es positivo ni negativo, depende de cómo se afronte”, dice el manual del Ministerio de Educación (Minedu) “Aprendiendo a resolver conflictos en las instituciones educativas”.
De destructivos a constructivos. Según este texto, el conflicto puede ser destructivo cuando conduce a comportamientos irresponsables e, incluso, dañinos, como pueden ser las disputas o palabras altisonantes. El conflicto será constructivo si favorece la clarificación y resolución de problemas, fomenta la cooperación entre las personas al conocerse mejor, permite la solución de un problema latente y ayuda a los individuos a desarrollar nuevos entendimientos y destrezas.
Formas de enfrectar un conflicto:
a) Una controversial, que se da a través de la agresión, la violencia, el abuso de poder o el autoritarismo.
b) Una colaborativa, mediante el diálogo, la cooperación, la negociación u otro mecanismo alternativo. Esta es la actitud recomendada porque implica pensar en el otro, verlo como un igual que requiere, tanto como yo, satisfacer sus intereses y necesidades.
Recomendaciones. La web educapeques recomienda que no huyas de los conflictos que se te presenten y que más bien utilices los problemas que surjan en el hogar para enseñar al niño o niña cómo actuar. En lugar de simplemente reñirle, explicarle lo que debe hacer la próxima vez.
El conflicto debe favorecer la comunicación en el niño o niña. El pequeño ha de saber exponer su punto de vista y resolver las situaciones que no le gustan. Es importante no llegar al extremo opuesto de los golpes y rabietas.
Pon en práctica los siguientes pasos para solucionar conflictos con tus hijos:
– Identifica el conflicto.
– Expresa cómo te sientes.
– Expresa las necesidades de ambas partes.
– Crea con ellos una lluvia de ideas.
– Piensa y razona con ellos sobre las ventajas e inconvenientes de cada opción. Las cosas malas y buenas.
– Elige entre todos la opción que parece mejor.
– Lleva a cabo la solución escogida y una vez hecho, valora lo ocurrido.
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