La alergia al gluten es una condición cada vez más conocida. Al ser diagnosticados, los pacientes deben hacer un cambio radical en sus vidas.
Cuando Lucía tenía 15 años comenzó a experimentar diarreas crónicas y bajo peso. Al año siguiente, fue hospitalizada por un cuadro de fiebre sin diagnóstico claro. Los síntomas fueron empeorando cada vez más hasta que una visita con la gastroenteróloga dio con la respuesta: la paciente era alérgica al gluten. Desde ese momento, su vida cambió.
La enfermedad celiaca es un trastorno que se produce en el intestino delgado al comer gluten, proteína que está presente en el trigo, el centeno y la cebada. Para el gastroenterólogo César Soriano, se trata de un mal poco frecuente en el Perú, a diferencia de países como Argentina y Uruguay, con mayor población de descendencia europea.
“Está enfermedad está más presente en Europa. Se calcula que ahí hay un celiaco por cada cien o hasta 250 personas”, explica el especialista, quien dijo además que entre las causas prevalece el factor genético.
¿Que está prohibido?
Puede parecer increíble pero el gluten está presente en la mayoría de alimentos. No solo en los elaborados a partir del trigo, cebada, centeno y avena, sino también en subproductos como la harina, sémola y proteínas. Así que las pastas, el pan, las galletas e incluso los embutidos, cervezas, dulces y comidas preparadas, quedan estrictamente prohibidos.
En la industria alimentaria se ha añadido el gluten a los productos debido a que le da elasticidad a las masas. Cerca del 70% de los productos manufacturados contienen gluten y allí radica la importancia de leer bien las etiquetas y conocer los que están permitidos. Los productos no comestibles tampoco se salvan, pues algunos lápices labiales, pastas de dientes y enjuagues bucales también contienen gluten o germen de trigo entre sus componentes.
¿Qué se puede comer?
Existen alternativas de alimentos certificados, pero son muchos más los alimentos naturales libres de gluten, como todas las frutas, verduras, carnes, cereales, arroz, maíz, papas, legumbres y frutos secos. “Lo importante es saber variar los alimentos y preparar comidas entretenidas, de la misma manera que haría una persona que no es celiaca”, menciona Soriano.
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