La resiliencia nos ayuda a superar dificultades y a aprender de ellas como parte de nuestro desarrollo y fortalecimiento personal.
A lo largo de nuestra vida vamos a encontrarnos con diferentes adversidades a las que no sabremos cómo enfrentarnos. Ante estas situaciones, nuestras decisiones necesitan ser las mejores. ¿Cómo lograrlo? Teniendo una conducta resiliente.
Se trata de mantener una actitud positiva a pesar de las circunstancias difíciles, consiste además, en saber aprender de la derrota y transformarla en oportunidad de desarrollo personal, explica Rafaela Santos, especialista en psiquiatría y autora del libro “Levantarse y luchar”.
La resiliencia se puede convertir en una habilidad. Aunque no es innata puede ser aprendida desde el autoconocimiento de nuestras capacidades y vulnerabilidades.
También va de la mano con la capacidad de aprender de los errores para fortalecernos como personas.

Según Santos, el desarrollo de la resiliencia se basa en los siguientes diez pilares:
1. Introspección: Observarse, conocerse a sí mismo y darse una respuesta honesta en relación al mundo exterior.
2. Motivación esencial: Darle sentido a la vida creando tu propio proyecto transcendente.
3. Autorregulación emocional: Afrontar tensiones sin victimismo como parte de la vida, debilitando la respuesta al estrés.
4. Independencia y autonomía emocional: Mantener distancia emocional y física ante los conflictos sin caer en el aislamiento. Saber fijar límites entre uno mismo y el medio con problemas.
5. Confianza en sí mismo y en sus propios recursos: Adecuada autoestima, iniciativa y responsabilidad para lograr autonomía personal.
6. Capacidad de relacionarse: Establecer vínculos afectivos con otras personas creando relaciones saludables. Equilibrar la propia necesidad de afecto con la actitud de ayudar a otros.
7. Actitud positiva y optimismo: Resolver problemas de forma creativa.
8. Sentido del humor y creatividad: Los problemas se resuelven relativizando y sabiendo encontrar lo cómico en la propia tragedia.
9. Colaboración y compromiso: Comprometerse con valores y ayudar a otros.
10. Moralidad, ética y coherencia: Mantener una unidad de vida entre lo que se dice y lo que se hace.
Comparte esta noticia