Cassiopeia A es el remanente más joven conocido de una estrella masiva en explosión en nuestra galaxia y James Webb ha visto detalles únicos en su observación.
Científicos han detectado detalles únicos de los remanentes de la estrella Cassiopeia A gracias a nuevas imágenes capturas por James Webb.
Este astro es el remanente más joven conocido de una estrella masiva en explosión en nuestra galaxia, lo que lo convierte en una oportunidad única para aprender más sobre cómo ocurren tales supernovas.
Ciencia como nunca vista
Se cree que estos restos son cruciales para sembrar nuevas generaciones de estrellas y planetas con elementos biológicamente importantes como el calcio y el hierro.
Sin embargo, la hora y la fecha de la explosión estelar que creó esta colección de gas, polvo y escombros nunca se han confirmado por completo. Las mejores estimaciones son que la luz de la supernova que generó Cas A llegó a la Tierra en agosto de 1680, hace unos 340 años.
Estas imágenes contienen una cantidad abrumadora de información sobre las fases evolutivas poco conocidas por las que pasó la estrella antes de la explosión, señala a Forbes el astrónomo de la Universidad de Purdue Danny Milisavljevic, investigador principal del programa Webb que capturó las observaciones.
Cassiopeia A es un remanente prototípico de supernova que ha sido ampliamente estudiado por varios observatorios terrestres y espaciales, incluido el Observatorio de rayos X Chandra de la NASA. Las observaciones de múltiples longitudes de onda se pueden combinar para proporcionar a los científicos una comprensión más completa del remanente.
Los llamativos colores de la nueva imagen de Cassiopeia A, en la que la luz infrarroja se traduce en longitudes de onda de luz visible, contienen una gran cantidad de información científica que el equipo está empezando a desentrañar.
En el exterior de la burbuja, particularmente en la parte superior e izquierda, se encuentran cortinas de material que parecen anaranjadas y rojas debido a la emisión de polvo caliente. Esto marca dónde el material expulsado de la estrella que explotó choca contra el gas y el polvo circunestelares circundantes.
En el interior de esta capa exterior se encuentran filamentos moteados de color rosa brillante salpicados de grumos y nudos. Esto representa material de la propia estrella, que brilla debido a una mezcla de varios elementos pesados, como oxígeno, argón y neón, así como a la emisión de polvo.
Origen del polvo cósmico
Las observaciones han encontrado que incluso las galaxias muy jóvenes en el universo primitivo están inundadas con cantidades masivas de polvo. Es difícil explicar los orígenes de este polvo sin invocar las supernovas, que arrojan grandes cantidades de elementos pesados (los componentes básicos del polvo) a través del espacio.
Sin embargo, las observaciones existentes de supernovas no han podido explicar de manera concluyente la cantidad de polvo que vemos en esas primeras galaxias. Al estudiar Cas A con James Webb, los astrónomos esperan obtener una mejor comprensión de su contenido de polvo, lo que puede ayudar a informar nuestra comprensión de dónde se crean los componentes básicos de los planetas y de nosotros mismos.
El remanente abarca unos 10 años luz y se encuentra a 11 mil años luz de distancia en la constelación de Cassiopeia.
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