El expolicía sudafricano Mark Minnie fue hallado muerte de un disparo en la cabeza. Minnie era coautor de libro que destapa detalles de una red de pedofilia que involucraba a altos cargos políticos del "apartheid".
El expolicía sudafricano Mark Minnie, coautor de un libro recién publicado que destapa detalles de una red de pedofilia que involucraba a altos cargos políticos del "apartheid", fue hallado muerto de un disparo en la cabeza, informó la prensa del país.
Minnie se encontraba de visita en la granja de un amigo, en la zona de la ciudad de Port Elizabeth (en el sur del país), y su cadáver fue descubierto anoche junto a un arma de fuego.
Según fuentes policiales consultadas por el diario Times, el dueño de la granja había salido con sus trabajadores y al regresar encontró el cadáver.
"El amigo fue a la casa, fue a la habitación del fallecido y notó que no estaba en ella. Buscó al fallecido y lo encontró tendido cerca de unos arbustos con una herida de bala en la cabeza. A su lado fue encontrada un arma de fuego", concretó el portavoz policial Johan Rheeder, citado hoy por ese periódico.
Aún no se han divulgado las hipótesis sobre las que trabaja la Policía pero la noticia de la muerte de Minnie causó un fuerte impacto en la opinión pública sudafricana. La Policía no ha confirmado oficialmente la identidad del fallecido, pero sí lo ha hecho el coautor de la obra, el periodista Chris Steyn.
El libro se titula "The Lost Boys of Bird Island" (Los chicos perdidos de la isla Bird) y en él se dan detalles sobre una supuesta red de pedofilia que involucraba a los exministros Magnus Malan y John Wiley (ambos fallecidos) y a otros altos cargos de la era del régimen de segregación racial o "apartheid".
También se menciona, sin revelar su identidad, a un tercer ministro del "apartheid" involucrado que aún está vivo.
De acuerdo con las investigaciones de Steyn y Minnie, en la década de 1980 estos altos cargos llevaban a menores a "excursiones de pesca" en la isla Bird, situada junto a Port Elizabeth, y abusaban sexualmente de ellos.
Los autores acusan a la Policía local de la época de frenar las investigaciones sobre estos sucesos.
El expolicía fallecido residía actualmente en China pero se encontraba de visita en su país natal. EFE
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