Fue el discípulo más amado de Jesús y escribió el Apocalipsis.
Tenía 20 años aproximadamente cuando Jesús lo llamó para el apostolado. Fue sin duda el más joven de los discípulos y se le distingue como el discípulo más amado de Jesús.
Junto a Pedro y Santiago acompañó a Jesús en los momentos más solemnes. La resurrección de la hija de Jairo, la transfiguración y la agonía de Jesús en el Monte de Los Olivos. Fue el apóstol que reclinó su cabeza sobre el pecho de Jesús en la Última Cena y aquel que estuvo al pie de la cruz con la virgen María, a quien encomendó cuidar.
Fue el único de los apóstoles que no murió martirizado y quien pudo profetizar el fin de los tiempos en uno de los libros más polémicos y misteriosos del nuevo testamento en la Biblia: El Apocalipsis.

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